París visto por... Rohmer

3 DVD + Libro (62 págs.). Intermedio. 24 euros.

La edición española de DVD ha sido muy generosa con la filmografía de Éric Rohmer, fallecido hace una semana. El sello Manga editó poco a poco buena parte de sus largometrajes, de La coleccionista (1967), el tercero de sus cuentos morales, a Cuento de verano (1996), el último de sus cuentos de las cuatro estaciones. Filmax puso en el mercado Cuento de otoño, mientras que sus últimos trabajos, La inglesa y el duque, Triple agente y El romance de Astrea y Celadón, han ido apareciendo puntualmente en el sello Cameo. Estos títulos, a los que hay que sumar Mi noche con Maud, La rodilla de Clara, El amor después del mediodía, La Marquesa de O, La mujer del aviador, La buena boda, Pauline en la playa, Las noches de la luna llena, El rayo verde, El amigo de mi amiga y El árbol, el alcalde y la mediateca, conforman una de las carreras más coherentes y rigurosas del cine moderno.

Faltaban, sin embargo, varias obras capitales de su cine de ficción (queda pendiente, no obstante, la recuperación de sus documentales y sus trabajos para la televisión), entre ellas su primer largometraje, El signo del león (1959), que daba el pistoletazo de salida a la nouvelle vague tras años de entrenamiento teórico-crítico en las páginas de Cahiers du cinéma. París se erige en protagonista de este primer filme, en su entramado de calles, esquinas, jardines y muelles testigos del deambular existencial de su protagonista en un periplo que materializa las preocupaciones de Rohmer por la ontología del espacio y su puesta en escena cinematográfica.

Los dos siguientes trabajos que se incluyen en este cofre son, respectivamente, las dos primeras entregas de sus cuentos morales, dos mediometrajes, La panadera de Monceau (1962) y La carrera de Suzanne (1963), que apuntan ya las maneras de un cine urbano y aparentemente ligero sobre las relaciones sentimentales que conjuga la observación objetiva con el discurso interior (construido a través de la palabra) de personajes movidos por el azar que experimentan dilemas morales de diversa índole.

32 años más tarde, Les rendez-vous de Paris (1995) sigue haciendo de la promenade callejera el dispositivo idóneo para activar la acción y el diálogo, en Rohmer siempre rico e inteligente, y hacer progresar sus tres historias tanto como los desplazamientos de sus jóvenes, hermosos y enamorados protagonistas antes de que éstos se pierdan de nuevo entre la multitud y el anonimato de la ciudad, tal y como señala Glòria Salvadó en el texto del libro que acompaña la edición y que incluye también los dos relatos de Rohmer que dieron lugar a La panadera de Monceau y La carrera de Suzanne.

Como es costumbre, las ediciones de Intermedio completan su oferta con material extra de primer orden. El DVD de El signo del león viene acompañado con los cortometrajes, también inéditos: Presentación o Charlotte y su bistec (1951), protagonizado por un joven Godard, y Nadja en París (1964), documento ficcionalizado sobre la vida en la ciudad de una estudiante extranjera. El segundo DVD trae de regalo la magnífica charla filmada entre Rohmer, Jean Renoir y Henri Langlois a propósito de Lumière (1968), una lección magistral sobre los orígenes del cine y su relación con la modernidad y la Historia del Arte.