–¿Por qué quiere liderar el Colegio de Abogados de Cádiz?

–En mi caso, porque quiero acabar un proyecto que inicie hace muchos años. En 1989 ocupé el cargo de diputado noveno, siendo el primer abogado de San Fernando en hacerlo. En el año 2002 presenté el proyecto de representación territorial por delegaciones, que fue único en su momento.

A continuación, propuse a la Junta la creación de las delegaciones en cada partido judicial, dotándolas de personal y medios informáticos. En el año 2014 fui elegido bibliotecario con el proyecto de crear una biblioteca digital al alcance de todos los compañeros desde sus propios despachos, lo cual se ha logrado tras muchos esfuerzos y es una realidad a día de hoy. Asimismo, me he ocupado de las nuevas tecnologías del Colegio, proponiendo la implantación de una nueva página web y una pionera app con prestaciones de todo tipo.

Lo último que hemos conseguido es introducir en el nuevo estatuto que entrara en vigor muy pronto el voto telemático, con lo que todos los colegiados podrán votar en todas las consultas que se les hagan desde sus propios despachos.

Conozco muy bien el funcionamiento Colegio y tengo muy claros los retos a los que nos enfrentamos: mejorar nuestra eficacia en la atención a los colegiados, mejorar nuestra transparencia y, sobre todo, la participación de todos los abogados en la vida colegial.

Hemos formado un equipo y diseñado un proyecto con medidas concretas a aplicar de inmediato fruto de la experiencia y de las aportaciones de todos los grupos colegiales. Creo sinceramente que puedo encabezar este proyecto con este equipo.

–En caso de ser elegido, ¿qué cambios considera oportunos llevar a cabo para el mejor funcionamiento de la entidad colegial?

–Los cambios que proponemos están recogidos en el decálogo que hemos hecho llegar a todos los compañeros y que se pueden resumir en los tres principios de nuestra candidatura: transparencia, eficacia y participación.

Apostamos por la reordenación de los sistemas de trabajo del personal y los recursos del Colegio para lograr la eficacia en la prestación de servicios. También por los  cursos de reciclaje de personal, la implantación de nuevas herramientas informáticas, la creación de un nuevo programa informático para la gestión del turno de oficio y la reordenación del Servicio de Orientación Jurídica, haciéndolo más abierto y participativo.

Además, queremos fomentar la ayuda a los colegiados que se inician en el ejercicio, creando el servicio de tutores con colegiados experimentados que voluntariamente asesoren a los nuevos;hacer gratuitos todos los cursos de formación obligatorios para el turno de oficio;revisar las cuotas de los nuevos colegiados y aumentar los descuentos que bonifican los cinco primeros años, así como la exención de cuotas durante la baja maternal y las enfermedades de larga duración.

Planteamos también la puesta  en marcha de una fundación para la ayuda a colegiados necesitados;la mejora de la transparencia con la publicación de todos los contratos que se adjudican en el Colegio y de las cuentas de éste, que ya están publicadas en el portal de transparencia.

Aumentar la implicación de los colegiados mediante su integración en las comisiones colegiales para que tengan cumplido conocimiento del funcionamiento de la entidad, potenciar las comisiones de formación que se van a implantar con nuevos responsables y mejorar la formación de calidad especializada conforman también  nuestros objetivos.

–Por contra, ¿qué aspectos deben seguir potenciándose?

–La biblioteca digital y las nuevas tecnologías. La profesión se enfrenta a unos nuevos retos que exigen un mayor nivel de digitalización de los despachos y el Colegio debe abanderar esa labor de formación en las nuevas tecnologías y ofrecer a los colegiados las opciones más asequibles.

Igualmente, la formación tanto a nivel provincial como a nivel local, continuando con las jornadas en las delegaciones que se comenzaron con la experiencia piloto de Arcos y La Línea que tan buenos resultados han dado.

–Parece que el proyecto de la Ciudad de la Justicia comienza a dar pasos para convertirse en una realidad por fin. ¿Qué opinión le merece la puesta en marcha de esta infraestructura judicial en los antiguos depósitos de tabacos?

–Nuestro Colegio, a través de la Junta de Gobierno, ya expresó su disconformidad con este proyecto que no es más que una adaptación de un edificio viejo a una utilidad nueva. Nosotros hemos mantenido en todo momento la necesidad de un edificio nuevo, que asuma la concentración de todos los órganos judiciales al igual que las Ciudades de la Justicia de Córdoba, Málaga...  que han resultado ser un éxito de planteamiento y ejecución.

En caso de Cádiz, se ha optado por esta solución que no asume la concentración de todos los órganos judiciales y se ha desechado la construcción de un edificio nuevo en los terrenos que ya estaban reservados.

–¿Qué piensa sobre que la Audiencia y la Fiscalía de Cádiz se mantengan en el actual Palacio de Justicia de la Cuesta de las Calesas y no se trasladen a la futura sede unificada?

–Estamos completamente en contra de esa decisión que contraviene el principio de concentración de órganos judiciales y nos condena a seguir peregrinando de un sitio a otro cuando lo práctico y eficaz es que al menos la Fiscalía esté  donde se encuentre el resto de órganos judiciales para facilitar la comunicación entre los abogados y los fiscales, un aspecto éste muy importante para la agilización de los procesos.

–¿Existe una verdadera apuesta por digitalizar la Administración de Justicia? ¿Y por dotarla de más medios humanos?

–Hoy en día esa apuesta no la apreciamos por ninguna parte. Seguimos teniendo un sistema informático de gestión de los procedimientos que impide que los abogados podamos consultar los casos en los cuales estamos personados, como se hace ya en la mayoría de las comunidades que tienen transferida la competencia en materia  de Justicia.

El programa actual no permite la digitalización de los expedientes de forma completa y ordenada ni es compatible con herramientas informáticas que el Ministerio de Justicia ha puesto a disposición de las comunidades autónomas, lo que nos condena a un atraso informático y de gestión de años.

En cuanto a los medios humanos, faltan más juzgados. La sobrecarga en la mayoría de los juzgados de la provincia es tal que se duplican o triplican los módulos máximos de volumen de trabajo que establece el Consejo General del Poder Judicial. Esto provoca una ralentización de los procedimientos que hace que acudir a la Justicia en nuestra provincia sea un calvario.

La situación de los Juzgados de lo Social en la provincia de Cádiz tiene tintes dramáticos, con señalamientos a dos y tres años vista con unos gravísimos perjuicios para los ciudadanos.

–Por último, lance un mensaje para animar a sus compañeros para que respalden su candidatura en los comicios del próximo 25 de noviembre.

–Cada cuatro años tienen la oportunidad de valorar lo que se ha realizado y las propuestas que se les presentan. En nuestro caso son propuestas concretas resultado de las consultas con todo tipo de compañeros y apoyadas por todo el conjunto de la candidatura, por lo que van a dar resultados inmediato. Solo su voto es el que valida las propuestas. No votar es una mala opción, el Colegio es de todos y solo desde la participación se puede conseguir un modelo de Colegio.