Acerinox ha asegurado al comité de empresa de su planta en Palmones, en Los Barrios, que en breve presentará un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que afectará a unos 300 trabajadores. La empresa ya había anunciado su intención de prescindir de este número de empleados para garantizar la viabilidad de la factoría y ha decidido optar por un ERE para hacerlo.

Fuentes sindicales señalan que la empresa les citará a una nueva reunión en la que abordar tanto estos despidos como la negociación del convenio colectivo, que lleva meses atascada.

Desde el comité de empresa rechazan las medidas y solo se muestran dispuestos a aceptar, en un primer momento, las prejubilaciones pactadas por aquellos que cumplan los requisitos para acogerse a ella. La empresa mantiene desde que anunció los despidos que pretende prescindir fundamentalmente de trabajadores cercanos a la edad de jubilación. 

Las fuentes sindicales destacan que la compañía sigue teniendo beneficios, a pesar de la situación de la industria siderometalúrgica y de que el grupo no atraviesa su mejor momento. En el primer semestre, el grupo vio caer un 50% sus beneficios por las tensiones comerciales, las medidas proteccionistas inauguradas por la Administración Trump y la ralentización de la demanda en un contexto de incertidumbre en los mercados. Y Europa, mercado de la factoría de Acerinox en Los Barrios, está en el grupo que más sufre las consecuencias de esa incertidumbre.

La compañía cerró el ejercicio pasado con su mejor resultado en una década, 237 millones de euros, y con un aumento de la facturación hasta los 5.011 millones, pero también con un menor Ebitda y menos producción de acería y laminado en caliente derivados de un brusco deterioro del mercado en el cuarto trimestre. Esa distorsión se cebó con la fábrica de Los Barrios, que vio caer su producción y márgenes a unos niveles inesperados.