No se sabe muy bien dónde empieza el pulso que mantiene la secretaria general del PSOE de La Línea, Gemma Araujo, con el alcalde de La Línea, Juan Franco (La Línea 100x100), y dónde termina la batalla orgánica en el PSOE. Sea como fuere, la Junta de Comarca de la Mancomunidad de Municipios del Campo de Gibraltar aprobará este 18 de enero la prórroga por quince años más del servicio de depuración de aguas de La Línea de la Concepción a la empresa Aqualia. Lo hará con el voto de Franco, más los del presidente socialista del órgano mancomunado, Juan Lozano, y de los alcaldes de San Roque, Tarifa y Castellar, también del PSOE. Y será con el criterio manifiestamente en contra de la secretaria general del partido en La Línea y diputada en el Congreso, Gemma Araujo, que en declaraciones a Europa Sur ha anunciado que recurrirá la decisión por considerarla contraria a Derecho.

La dos últimas semanas han sido especialmente tensas entre Araujo y Lozano después de que la primera tuviese noticias de la operación de prórroga del servicio, en la que venía trabajando con máxima reserva desde hacía meses el equipo de gobierno municipal linense. La líder de los socialistas de La Línea, según ha relatado ella misma, solo fue informada por uno de los alcaldes de su partido una vez convocada la reunión de la Junta de Comarca.

Este hecho provocó una fuerte discusión entre la responsable del PSOE de La Línea y el presidente de la Mancomunidad, tanto por el fondo de la cuestión, la prórroga de la concesión, como por las formas, al haber quedado aquella al margen de una operación “de la que debí ser informada mucho antes por mis compañeros de partido”.

Juan Franco amenazó al PSOE con romper el pacto de cogobierno que mantienen en la Mancomunidad y dejarles en minoría

La reacción de Araujo provocó de inmediato que los alcaldes socialistas echasen el freno y pidiesen detalles concretos de la prórroga a la que estaban a punto de dar su visto bueno. La respuesta airada de Juan Franco, según se apunta desde su entorno, fue amenazar directamente al PSOE con romper el pacto de cogobierno que mantienen en la Mancomunidad y dejarles en minoría.

La cita de la Junta de Comarca iba a celebrarse inicialmente el pasado viernes, día 15, pero la imprevista reunión de los alcaldes del Campo de Gibraltar con la delegada territorial de Salud, Isabel Paredes, para abordar la situación del Covid-19 fue aprovechada como excusa por los socialistas para aplazarla, debatir entre ellos sobre la situación y tratar de llegar a un entendimiento. Y así fue.

La prórroga del contrato que se llevará finalmente este lunes a la Junta de Comarca incluye ahora, según uno de los alcaldes socialistas consultados, el compromiso de darle publicidad previa al procedimiento y la garantía de financiación por parte de Aqualia de cuantiosas obras de inversión en la estación depuradora de La Línea, con lo que se salvan los reparos puestos de manifiesto por los técnicos. Resultado: la prórroga será aprobada con el voto de los representantes del PSOE (Lozano y los tres regidores) y de Juan Franco, en tanto es previsible que el resto de formaciones se abstengan.

Recurso de reposición

No lo ve tan claro Araujo, la representante más afín a la dirección federal de Pedro Sánchez en el Campo de Gibraltar. La diputada nacional no esconde su enojo con los pasos dados por sus compañeros de partido y avisa de que presentará ante la Mancomunidad un recurso de reposición contra la ampliación del contrato con la empresa de aguas.

La secretaria general del PSOE de La Línea entiende que existe un precedente que juega a su favor: la anulación en 2009 por parte del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía de un acuerdo similar, con Aqualia también como protagonista, y adoptado en enero de 2005 por el equipo de gobierno municipal, que entonces encabezaba Juan Carlos Juárez (PP). El socialista Miguel Tornay recurrió y ganó. Araujo afirma que el nuevo recurso será interpuesto por el PSOE de La Línea y que, de no prosperar, iniciará acciones judiciales en la Justicia ordinaria.

Desde el gobierno local de La Línea se rechaza todo paralelismo con el pasado y se muestra calma sobre el ajuste legal de la operación, más aún tras las correcciones introducidas a última hora. Juan Franco ha expuesto en su redes sociales los beneficios de esta operación, que resume en seis puntos:

• Inversión en la depuradora de 1,6 millones de euros: hay que reparar el vaso y adaptar a normativa la estación de aguas residuales, evitando los vertidos irregulares al mar y eliminando los malos olores.
• Inversión en la depuradora para implantar el ciclo terciario de 6,2 millones de euros: va a permitir crear el servicio de reutilización de aguas para el riego de campos de golf y riego urbano, cuyo coste será asumido por los usuarios de ese servicio.
• Inversión de mejoras en la red de 6,75 millones de euros: evitará inundaciones y defectos en la red y abaratará los costes de mantenimiento.
• Mejora en el servicio de saneamiento de 2,6 millones de euros: se va dotar de un camión vacío adicional más otras mejoras.
• Creación de un fondo social del 1,5% de la facturación anual: para asistir a personas en situación de riesgo social extremo, 1,6 millones de euros en total.
• Bajada del 18,5% de la tarifa de depuración: lo que supone un 8,25% del total del recibo de alcantarillado y depuración.

La propuesta, subraya Franco, ha sido muy trabajada a lo largo de los últimos meses y cuenta con "todos los informes favorables".