Los independentistas catalanes brindan su apoyo a Gibraltar en la Eurocámara

Tres eurodiputados británicos -una laborista, un conservador y un euroescéptico- intentarán con sendas enmiendas que la resolución que hoy miércoles votará la Eurocámara sobre el Brexit incluya una mención a Gibraltar, una línea roja para España. A la enmienda de la laboralista Claire Moody se han sumado los dos eurodiputados de ERC (Josep-Maria Terricabras y Jordi Solé), así como el de PdeCAT, Ramón Tremosa.

El conservador Ashley Fox y Moody solicitan que el punto del texto en el que se pide una especial atención al hecho que "tanto en Irlanda del Norte como en Escocia ganó la opción de permanencia en la Unión Europea" se diga "Irlanda del Norte, Escocia y también en Gibraltar".

Por su parte, Raymond Finch (UKIP) ha introducido una enmienda que pide tener en cuenta en las negociaciones "la preocupación real de la gente de Gibraltar sobre su frontera con España".

Con todo, la aritmética política prevé que no saldrán adelante las citadas enmiendas a la resolución pactada por el Partido Popular Europeo (PPE), los socialdemócratas (S&D), los liberales (ALDE), la Izquierda Unitaria (GUE/NGL) y los Verdes, en la que no aparece ni una vez la palabra "Gibraltar".

El líder del Partido Popular Europeo, Manfred Weber, ha dejado claro que, en la línea de la posición del Gobierno español, no aprobará ninguna resolución en la que se mencione al Peñón, al considerar que es un asunto que debe tratarse por Madrid y Londres tras el Brexit de forma bilateral.

En la resolución -que se prevé salga adelante en la jornada de hoy-, la Eurocámara reclamará que el Reino Unido pague los costes del Brexit y un trato fronterizo especial para Irlanda del Norte.

El acuerdo del "divorcio" deberá aclarar entre otras prioridades, según la Eurocámara, el futuro estatuto legal de los británicos que viven en la Unión Europea (UE) y viceversa, así como provisiones sobre sus derechos fundamentales tras el Brexit.

Igualmente, los eurodiputados reclamarán aclarar las nuevas fronteras exteriores de la Unió Europea, para cuyo diseño algunos grupos políticos de la Cámara quieren un trato especial para Irlanda del Norte, de forma que no se torpedee el proceso de paz con más inestabilidad, según relataron fuentes parlamentarias.