Lara Stone no es una modelo al uso; no tiene un rostro perfecto, su voz no es dulce y angelical, posee una curiosa separación entre dientes, un aspecto un tanto frío, melancólico, serio, toda una femme fatale. Pero es una de las maniquíes más demandadas y que más portadas ha acaparado en los últimos años. Por si fuera poco, la revista GQ (edición británica) acaba de nombrarla 'Mujer del Año'. Por algo será.

Alemana de nacimiento, pero holandesa de adopción (de madre holandesa y padre inglés), esta chica de 25 años es toda una veterana en el mundo de la moda y ha sido imagen durante varias temporadas de Givenchy, Hugo Boss o Calvin Klein.

Todo comenzó en el año 1995, cuando tenía 12 años y estaba en el metro de París. Una ojeadora de la agencia Elite Models consiguió convencer a su madre de que su hija tenía futuro en la moda. Lara nunca se había planteado ser modelo, pero su madre la convenció y envió unas fotos suyas a la agencia. Trascurridos unos años, en 1999, Lara acudió a Amsterdam para participar en el concurso nacional de Elite Model Look, en el que no resultó la ganadora, pero todos quedaron sorprendidos de su personalidad y presencia. Por entonces tenía 16 años y era más bien mala en el cole; de hecho, fue expulsada del instituto por mal comportamiento.

Sus primeros pasos como modelo en París, adonde se trasladó poco después, fueron duros. Sus padres tenían que costear su estancia ya que con los trabajos que obtenía apenas conseguía para mantenerse. Cuando ya se planteaba trabajar de otra cosa, le llegó la oferta que cambiaría su vida: en 2005 fichó por la agencia IMG y se le abren las puertas doradas de la moda. Ese mismo año comienza a aparecer en sus primeras portadas, como la del magazine italiano Ventiquattro. Incluso da el salto a las pasarelas desfilando para Cacharel o la firma Miu Miu y, posteriormente, en el desfile de Alta Costura de Givenchy, de la mano de Ricardo Tisci, uno de sus descubridores.

Una curiosidad: tiene un número de pie muy pequeño, el 37, por lo que en esos primeros desfiles solía salírsele el pie del zapato. Aunque en la actualidad muchos diseñadores le hacen el zapato a medida, reconoce que en ocasiones sigue pasando un mal rato a la hora de desfilar por este motivo. Y es que ya ha tenido alguna que otra caída.

En 2006 consigue sus primeras campañas publicitarias, es imagen de Sisley y sigue acaparando portadas como las de Elle. La fuerza y personalidad que transmite la hacen cada vez más solicitada y popular. Comienza a hablarse ya de una posible top model en ciernes. Mucha culpa de ello la tiene la directora de Vogue (edición francesa), Carine Roitfeild.

En 2007 participaba ya en más de 30 desfiles por temporada y se convierte en la imagen de Givenchy, Max Mara y Calvin Klein (reemplazando a Kate Moss). Algunas voces la tildan de antimodelo por sus poses y su forma de mostrarse ante las cámaras rompiendo con los cánones establecidos. Además, se convierte en imagen de H&M, Cavalli, Zara y Hugo Boss. Lara Stone es, sin duda, la modelo del momento. Hasta tal punto que la revista GQ le ha concedido el título de 'Mujer del Año'. Y seguirá dando qué hablar.