El Domingo Rociero, el Domingo por Sevillanas o el Domingo Especial, hay adjetivos para todos los gustos, arrancó cuando la gente quiso. Hay que tener en cuenta que el sábado de cabalgata pasa factura y eso se nota en unos más que en otros.

El día de feria por excelencia, el primer domingo, sigue siendo un éxito pero a nadie se le olvida que no hace tanto, a mediodía era casi imposible ir de una caseta a otra debido a las miles de personas que se daba cita en el ferial. La cosa ya está más relajada, el año pasado ocurrió lo mismo, pero siempre hay ganas de feria y al final se cosa se enmienda. El estallido del Domingo Rociero se retrasa así unas horas pero estalla de igual manera.  A las seis de la tarde ocurrió el milagro y Algeciras quiso celebrar por todo lo alto el Domingo Rociero. Y no sólo Algeciras porque mucha gente de municipios vecinos se sumaron a la fiesta como si de un peregrinaje se tratara, eso sí en autobús.

A la hora de comer muchas casetas tenían hueco e incluso algunos en la barra recordaban los años buenos. Las cosas han cambiado. La sempiterna crisis es lo que tiene.

Si el sábado el calor quiso ser protagonista, ayer domingo los termómetros se relajaron, algo que se agradeció. El verano acecha a la vuelta de la esquina pero se agradece que el levante quisiera sumarse a la fiesta.

Si hay un día que invita a vestirse de gitana ése es sin duda el Domingo Rociero. Ponerse guapa implica que la gente te vea y aprecie que el traje te queda como anillo al dedo. Este año numerosas mujeres no perdieron la oportunidad y lucieron su mejor vestido por el ferial.  Se trata de una tradición que además se hereda con facilidad. Solo hay que ver la cantidad de madres jóvenes que acudieron a la feria con sus hijas vestidas igual. Los genes mandan.  Bueno, los genes y las modas, o si no que le pregunten a Eugenia, la hija de Cayetana, la Duquesa de Alba, cuando creó tendencia hace años en la Feria de Sevilla vestida igual que su hija.

El Domingo Rociero invitó sobre todo a compartir con la familia y los amigos un rato de esos que no se repiten hasta el año que viene, de ahí su excepcionalidad. Son días de visitas y de invitados en casa. Como dicen algunos, "si vienes a Algeciras mejor ven en feria". Asimismo, muchos algecireños que emigraron fuera señalan estos días en rojo para volver a casa. Que no sólo la Navidad es importante, porque doce meses se hacen muy largos.

Este año la gente procuró no mencionar la crisis, ni los rescates, ni la prima de riesgo ni nada de lo que a diario forma parte de sus vidas porque parece que no hay otro tema. Así entre jarra de Rebujito la gente se fue animando y olvidando de la rutina, que aunque sea feliz también cansa. El precio de las jarras de Rebujito o de cerveza oscilaron entre los cinco y los nueve euros. Ir a la Feria no sale gratis y aunque muchos reconocieron que habían bajado algo los precios hizo falta echarse mano a la cartera más de una vez en toda la tarde, aunque ir a escote sea obligado.

Por otra parte, la calle Volantes fue testigo del paseo de caballistas. La teniente de alcalde delegada de Feria y Fiestas, Juana Cid, acudió puntual a la cita. De hecho, la edil cerró esta semana con los representantes de las peñas El estribo y El caballo los detalles de su participación en la Feria Real.

Así, el paseo de caballos en el Parque Feria se inauguró a mediodía de ayer con éxito de participación. El paseo, que se prolongará cada jornada de feria desde el mediodía hasta las seis de la tarde, contó con señalización específica para ellos. En este sentido, hay que destacar que cada ejemplar contó con una tarjeta identificativa en la que estaban sus datos y los del seguro obligatorio, al tiempo que jinetes y amazonas debían seguir unas pautas de vestimenta, que pasaron obligatoriamente por el pantalón largo y la camisa de color blanco, independientemente de quienes quieran lucir vestimenta flamenca o campera. Los niños tampoco se perdieron esta cita y es que el amor por los caballos también se hereda. El Domingo Rociero es un estado de ánimo. La Feria de Algeciras sólo ha hecho empezar. Quedan siete días. Hoy jugará España pero no es la primera vez que fútbol y feria van de la mano.