Feria de Algeciras

El Caballo celebra la recta final con entregas de premios y su tradicional paseo

  • El Estribo también disfruta de la afición a este animal aunque lamenta la falta de espacio en el Real para uso de los jinetes

La Feria Real de Algeciras tiene una gran familia de aficionados al caballo. Las casetas como El Caballo y El Estribo son un buen ejemplo de esta afición, aunque la falta de espacio está afectando, en gran medida, a que los tradicionales paseos por el Real se conviertan en los verdaderos protagonistas durante los nueve días.

El presidente de la caseta El Estribo, Antonio Coronil, destacó ayer que están muy contentos con la marcha de la fiesta, “aunque este año hemos notado la participación de menos gente, pero pienso que ha sido para toda la feria”.

En lo que respecta al ámbito del caballo en cuanto a los típicos paseos y actividades, Coronil explicó que las jornadas se han llevado bien, pese al problema habitual de escasez de espacio. “La gente viene menos porque al tener un espacio tan reducido no hay sitio y la gente se aburre”. La peña El Caballo organizó ayer un paseo a caballo en la que participaron 29 jinetes adultos, 17 pequeños, en pareja y también infantil.

La caseta cuenta con 50 socios y lleva desde 1987, las principales actividades que realizan rondan alrededor de las cabalgatas y de los paseos a caballo que organizan a diario. No obstante, hoy se entregarán los premios a los jinetes. Por otro lado, Coronil destacó que la feria en lo que respecta al número de asistentes “está más flojita”, aunque ese no es un problema que les afecte en exceso ya que es una caseta familiar y “siempre estamos juntos”.

El día más fuerte para ellos el primer sábado, el Domingo Rociero y el último fin de semana. “Solemos vivir la feria de día, ahora se está llevando muy a cabo en  Algeciras, pero lo que es el mundo del caballo llevamos muchos años vivienda la feria de día”.

La caseta El Estribo es otra de las grandes exponentes el mundo del caballo. En este caso, Gaspar Perea explicó que son unos 100 socios. “Hace unos años éramos mucha gente pero cada vez hay menos participantes para los paseos porque nos están quitando la calle”. El día grande para ellos es el Domingo Rociero y también ayer sábado que es el paseo a caballo, “pero hay gente que no le interesa que se lleve a cabo”, puntualizó Perea.

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