Vía Augusta
Alberto Grimaldi
Anatomía de un bostezo
Aunque históricamente siempre se haya citado al Barcelona y al Real Madrid cuando en las quinielas se apostaba por los claros favoritos a ganar el título de la ACB, ahora la distancia vuelve a ser respecto al resto de competidores como en las anteriores décadas. En los 80 ejercieron un insultante dominio y en los 90, salvo las dos escaramuzas del Joventut y el pelotazo manresano, también. Desde la campaña 00-01 hasta la pasada, sus seis títulos ligueros, cuatro para los azulgrana por dos dispuestos en las vitrinas blancas, evidencian un duopolio, aunque las distancias entre ellos y los aspirantes se acortaron, no sólo por los dos entorchados que fueron a Vitoria y el que alzaron en Málaga, sino porque la apuesta económica del Tau y de Unicaja fue firme y dio resultados, al convertir la ACB en algo más que el puente aéreo Madrid-Barcelona.
La severa crisis económica que ha dejado tiritando a muchos y el desembarco de Florentino Pérez, el tío Gilito del fútbol y que no se corta un pelo en el baloncesto, han desembocado en una bipolaridad palmaria, pues si el Madrid ha tirado la casa por la ventana fichando a lo más granado del espectro europeo, empezando por su entrenador, Messina, y convenciendo a golpe de talonario a competidores directos como el Caja Laboral (Prigioni, Vidal) o el Khimki (Garbajosa) para formar una escuadra rocosa, dura en defensa, el Barça no se ha andado por las ramas y cubre sus sensibles bajas (Andersen, Ilyasova) con la joya de la corona (Ricky Rubio) y otros nombres de relumbrón continental (Erazem Lorbek, Morris, Mickeal).
Da la impresión de que en Álava, donde Querejeta ha querido ahorrar un buen dinero respecto a otros años, las aspiraciones son menores, pero no hay que descuidarse con Ivanovic. Se le ha ido el esqueleto principal, excepto Splitter, aunque Oleson, Marcelinho, English y Eliyahu están obligados a dar un paso más en sus carreras para optar a ser alternativa a los dos gallos de pelea del corral. En Málaga también pierden a uno de sus referentes (Cabezas) y a Haislip y Ndong, si bien Aíto busca potencia interior con Printezis y Freeland.
A Valencia sí que se le nota sobremanera que Juan Roig ha cortado el grifo. Ya no sale ni siquiera entre los cinco principales candidatos. El Bizkaia Bilbao Básket, anfitrión de la Copa del Rey, sí se ha reforzado muy bien. Quedándose con el bloque, incorpora a Mumbrú, Warren, Javi Rodríguez, Moiso... Ojo también con el Gran Canaria, donde vuelve Pedro Martínez.
En la pelea por salvar el pellejo, todos los caminos conducen a Santiago en el regreso a la ACB del antiguo Obradoiro, pero Murcia, Valladolid, Granada, Lagun Aro o Manresa deben andarse con cuidado.
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