Salva Ballesta dirigió su primer entrenamiento al frente del Algeciras CF y lo hizo con dos regalos, los dos primeros fichajes de invierno: Wilson Cuero y Jonathan Bijimine. El nuevo técnico albirrojo recibió a sus pupilos con una sesión de trabajo muy activa en la que el exfutbolista se vistió de corto y participó hasta en los rondos. Salva ya trata de meterse en la cabeza de su vestuario para levantar la moral con vistas a la primera batalla, la del próximo domingo en Yecla (17:30).

El Nuevo Mirador vivió este martes un día de estreno. Salva Ballesta, tras su presentación del lunes, se puso manos a la obra con la plantilla. El zaragozano fue testigo del incesante trasiego en los despachos del estadio, donde el club confirmó sus dos primeros refuerzos, el delantero colombiano Wilson Cuero y el defensa congoleño Jonathan Bijimine. Además, la directiva que preside Nicolás Andión ha alcanzado un acuerdo con el Eibar para traspasar al canterano algecireño Tote, que en las próximas horas rubricará su salto a un club de Primera que seguramente haga sitio al extremo en su filial, el Vitoria.

Salva piso el césped del Nuevo Mirador con ropa de faena. El maño tuvo la protocolaria charla con la caseta y organizó su primera sesión, en la que no participó Borja Vicent, que sí estuvo presente sobre el verde en chándal y charló con el cuerpo técnico. Borja arrastra molestias. Sí trabajaron Wilson Cuero y Bijimine junto a un grupo al que se vio animado. Junto a los porteros se ejercitó el Gato Romero, pendiente de saber qué pasará con su ficha.

La dirección deportiva del Algeciras sigue metida de lleno en el mercado de invierno, pendiente de cerrar una tercera incorporación más y sin descartar una cuarta con ficha sub-23. Evidentemente, lo que ocurra con la situación de la portería marcará y mucho el retoque de una plantilla en la que habrá alguna salida más salvo sorpresa.