El Algeciras CF quiere aumentar su estructura y, entre sus deseos, está el de potenciar la secretaría técnica con la figura de un director deportivo. El club del Nuevo Mirador es una institución en plena transición hacia la Sociedad Anónima Deportiva con mil y un frentes de batalla abiertos, pero con un paso firme hacia la profesionalización. Así camina el Algeciras desde que aterrizó Félix Sancho, quien, una vez tome el control total, está dispuesto a pasar al siguiente nivel de su proyecto.

La transición que vive en estos momentos el Algeciras tiene sus plazos en un mes de junio fundamental para el presente y el futuro de la entidad. Los responsables del día a día de la nave albirroja continúan con su trabajo cotidiano para cerrar el ejercicio 21-22 al mismo tiempo que preparan las bases de la temporada 22-23, la segunda en la Primera RFEF salvo que el TAD diga lo contrario (los albirrojos mantienen abierta su reclamación por alineación indebida del Castilla en la penúltima jornada y por disputar un playoff de ascenso que este fin de semana concluye con las finales).

Uno de los asuntos pendientes en el Algeciras es el del director deportivo. Los del Nuevo Mirador cuentan con la colaboración estrecha de Miguel León, una persona que ha prestado y sigue prestando una labor inestimable a los albirrojos. Una gran cuota de la responsabilidad de la confección de la plantilla ha sido suya y así lo han transmitido siempre desde el entorno de La Menacha. ¿Podría convertirse León en la persona responsable de ese puesto de manera completa y permanente? Es una posibilidad que alguna vez se ha puesto sobre la mesa aunque no haya llegado a plasmarse.

La otra opción es que el Algeciras, una vez culmine su transformación, busque con más pausa al candidato para un puesto que a día de hoy se antoja imprescindible para un equipo de esta categoría. Ya sea como figura única de director deportivo o integrado en una secretaría técnica de más de una persona, la gran mayoría de los clubes cuentan con un máximo responsable deportivo para una parcela que requiere dedicación todo el año y un plus de esfuerzo durante el mercado de verano, cuando más se negocia con los futbolistas.

El Algeciras ha tenido esta figura en diferentes etapas y la tuvo hasta el verano pasado. El primer proyecto de la era Sancho comenzó con la salida de Dani Alejo al Recreativo de Huelva y el desembarco de Sergio Fernández junto al burgalés. Fernández fue quien empezó a hacer y deshacer en una planificación que a finales de agosto reventó con la marcha del ovetense. Sancho asumió la culpa pero tampoco quiso hacer sangre y el Algeciras tuvo la enorme fortuna de contar con la ayuda de Miguel León, quien ya llevaba tiempo cerca del entorno del burgalés.

Esa buena relación no se tradujo en lo que habría sido lo más lógico: el nombramiento de León como nuevo director deportivo. Ambas partes apostaron por mantener su estatus tal cual y el cuerpo técnico de Iván Ania y los jugadores hicieron el resto del trabajo durante la competición.

A la espera de refrendar la situación con Iván Ania, que tiene contrato así como un plazo para buscar otra opción, la entidad prosigue navegando en estos primeros días de junio con la tranquilidad de que la columna vertebral del equipo cuenta con contrato en vigor.