El Algeciras CF tiene que empezar a dar carpetazo a la temporada 21-22, aunque paralelamente el club lleve su reclamación por los puntos contra el Castilla hasta la última instancia, ahora al TAD tras la desestimación del Comité de Apelación. Los del Nuevo Mirador saben que no tienen tiempo que perder y que el éxito de la próxima andadura pasa por asentar los cimientos lo antes posible. La primera piedra debe ser el entrenador y el primer anuncio, como es lógico, si Iván Ania va a seguir al frente del banquillo algecirista con el contrato que tiene en vigor.

El técnico ha cumplido el objetivo que el club le marcó el pasado verano: conseguir la permanencia sin apuros y pelear por disputar el playoff de ascenso hasta el final. Ania ha consolidado al Algeciras en la Primera RFEF, una categoría que se ha revelado incluso más competitiva de lo que se predecía antes de su puesta en marcha. Quienes pensaron que se trataba de una Segunda B se equivocaron por completo. El asturiano, al margen de los gustos personales de cada aficionado, ha hecho méritos sobrados en el Nuevo Mirador en un curso con muchos más aciertos que errores.

Iván Ania, como ya se ha mencionado, tiene contrato con el Algeciras ya que firmó por cuatro campañas cuando decidió unirse a un proyecto a medio plazo, al plan que Félix Sancho se ha marcado para intentar dar el salto al fútbol profesional. El propietario dejó un guiño a su técnico en una rueda de prensa a primeros de mayo en la que apostó por la continuidad de Ania con o sin ascenso. "El objetivo interno se ha cumplido, compitiendo siempre con los de arriba", señaló el burgalés, que calificó el asturiano como "un entrenador de primer nivel".

Si Ania ha hecho los deberes y Félix Sancho está más que satisfecho con el cuerpo técnico, lo normal es que ambas partes refrenden su compromiso, sin embargo hay dos factores que podrían dar un vuelco a la situación y que habrá que poner sobre la mesa.

Por un lado, cabe la posibilidad de que Iván Ania pueda recibir alguna proposición más atractiva o de mayor categoría. El míster que ascendió al Racing de Santander a Segunda tiene gran cartel, de hecho el pasado verano hubo varios clubes potentes que pujaron por sus servicios. A esto hay que unir la opción de que el asturiano quisiera un cambio de aires aunque en la zona ha encontrado un sitio para vivir feliz. No parece que la aclimatación vaya a ser un problema.

Ania cumplió los objetivos marcados por Félix Sancho

Por otro lado está la cuestión del proyecto que el Algeciras le vaya a presentar a Ania para la próxima temporada. Y seguramente este punto es el más importante para el técnico. ¿Volverá a tener el mismo objetivo o el club querrá dar un paso al frente en sus aspiraciones? ¿Mismos recursos para la plantilla, más o menos? ¿El club invertirá en estructura?

Estas y otras preguntas saldrán a la mesa de negociación. Una de las preocupaciones de Ania, que ha deslizado durante la campaña en varias ocasiones en ruedas de prensa, es que el cuerpo técnico solo tenga que preocuparse de eso, de entrenar. A nadie se le escapa que el Algeciras está en proceso de transformación, en su fase final para culminar la Sociedad Anónima Deportiva pero todavía en un periodo inicial de aumentar la estructura de un club con muchísimas carencias de puertas para dentro, algo en lo que Sancho invirtió cuando llegó con la incorporación de personal profesional. A nadie se le escapa que los albirrojos precisarán de la figura esencial de un director deportivo que esté 24 horas al pie del cañón en estos meses de planificación.

La plantilla dio por finalizada la campaña y la mayoría de los jugadores han puesto rumbo a sus hogares al igual que el cuerpo técnico. Ania ha marchado a su tierra para disfrutar de la familia y de un merecido descanso.

El algecirismo queda expectante a la espera de que el club se pronuncie sobre sus primeros pasos para la campaña 22-23. La mayoría confía en que sea con Iván Ania de nuevo a los mandos. Da la sensación de que las claves pasarán por proyecto deportivo, estructura y ambiciones.