El Algeciras CF se ha fijado en el delantero Ibrahima Dieng como posible refuerzo para el proyecto 20-21 en la Segunda B. El senegalés fue artífice de siete goles con el Haro Deportivo en el grupo II de la Segunda B en la temporada 2019-20, suspendida por la crisis del Covid-19 cuando restaban diez jornadas por disputarse en la categoría de bronce.

El conocido periodista Ángel García (@cazurreandoenOK) es quien pone sobre la pista el interés de los algeciristas por el goleador, un portento físico de más de 190, con pasado en clubes vascos como el Amorebiete, el Vitoria (el filial del Eibar, club muy ligado a los albirrojos tras el traspaso del algecireño Tote) y el Leioa. Ángel García también del interés del Barakaldo.

Ibrahima Dieng (Leona Thiaroye, Senegal, 18 de septiembre de 1997) va a cumplir 23 años y tiene una historia personal digna de ser relatada. Como muchos otros futbolistas africanos que se han abierto camino en Europa -en el Algeciras está reciente aún el caso de Moha-, Dieng desembarcó en España tras viajar como polizón en un barco.

El punta ha jugado en Amorebieta, Vitoria y Leioa

El delantero vivió una infancia difícil en un ciduad, un puerto mercantil cercano a Dakar, la capital. Su padre murió cuando era un niño y se crió junto a otros siete hermanos en la más absoluta pobreza. Ibrahima jugó la vida con 16 años al embarcar en un barco sin saber nadar para alcanzar el sueño europeo. Quería ir a Francia, sin embargo terminó en Tenerife. Allí pasó un tiempo en un centro para menores extranjeros (los conocidos centros Mena) y cuando alcanzó la mayoría de edad pudo viajar a Bilbao a través de un contacto familiar.

Dieng inició una nueva vida y pudo dedicarse al fútbol, su pasión. Fue cuando empezó en el Amorebieta, realizó una prueba en Lezama y pasó por distintos equipos hasta acabar el pasado curso en La Rioja con el Haro, donde ha explotado como máximo goleador de un conjunto que marchaba décimo.

En un extenso reportaje que le dedica la web nuevecuatrouno, el delantero explica como ha aprovechado su tiempo desde que desembarcó para sacar la ESO, un título en francés y varios cursos de otros idiomas. Ibra sueña con dar otro salto y asume que está ante una temporada clave por su edad. Para la afición del Haro se ha convertido en un jugador referente.