El Algeciras CF (Segunda B) se proclamó este sábado en Lepe campeón del XXIII Trofeo San Roque ante un voluntarioso equipo local que esta temporada volverá a militar en el grupo X de Tercera división. El gol de Tote a poco más de diez minutos del final fue a la postre decisivo para que los rojiblancos se impusieran no sin dificultades. Fue un choque entretenido. El San Roque de Lepe fue un más que digno rival y plantó cara al bloque albirrojo. Los visitantes, sin Ganet por molestias en el tobillo, dominaron el duelo pero acusaron cierta falta de remate.
Un lanzamiento de falta directa de Domínguez que se estrelló en la barrera lepera cerró una primera parte claramente dominada por los de Emilio Fajardo.
Los albirrojos supieron deshacerse de la presión inicial del conjunto aurinegro. Así, a los anfitriones solo les quedó el recurso del contraataque para llevar algo de peligro, escaso, hasta la portería defendida por Lopito.
El Algeciras CF tuvo más posesión y el primer acto se jugó casi por completo en campo local. Los rojiblancos, que acumulan bastantes jornadas de trabajo en sus piernas, empiezan a imponer su nueva categoría.
Una de las mejores ocasiones rojiblancas se concretó en el minuto 60, cuando Antonio Sánchez, que no ha perdido puntería desde el final de la pasada temporada, se topó con el palo de la meta aurinegra.
Pocos minutos después, Ferrera Macías expulsó a Iván Turrillo y dejó al Algeciras con diez jugadores sobre el maltrecho césped onubense.
El canterano Tote, que se mueve de maravilla entre líneas, se coló por el centro de la zaga onubense a diez minutos del final y desequilibró la balanza a favor del Algeciras. El gol fue celebrado con rabia por el extremo, que a una profundidad y remate en su juego.
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