El ex de la Balona y la UD Los Barrios Luis Lahera Gago Biri cuelga las botas. A sus 35 años y tras dos campañas en la Villa, el extremo jerezano ha decidido poner punto final a su trayectoria como futbolista para meterse de lleno en su faceta como entrenador.

Biri dejó huella en el Campo de Gibraltar, primero en sus dos años en La Línea y después con la Unión, con la que vivió una salvación heroica y una última campaña en la que casi se meten en la liguilla.

La irrupción de Biri en el fútbol jerezano fue meteórica: fichado por el nunca bien ponderado Pepe Salado, debutó con 17 años en el primer equipo del Xerez CD en diciembre de 2000 marcando un gol al Coria en Chapín, y así lo recogía la crónica de Diario de Jerez: “Un tal Biri , un niño con diecisiete añitos, que se metió a la afición en el bolsillo nada más saltar la terreno de juego con su gol, con caño incluido, su actitud, su velocidad endiablada y un desparpajo poco habitual para un ‘novato’ en la categoría. Para que el recital fuera completo, acabaron en el campo Biri , Borja, que estuvo bastante entonado los 10 minutos que jugó, y Rafa Mateos”, ahora concejal.

Luego, Biri fue traspasado al Mallorca y luego alternó Segunda B y Tercera hasta recalar en el Xerez DFC, en el que fue clave en dos ascensos y en el que ha comenzado su carrera como entrenador con los más pequeños.

"Amigos, compañeros, familiares y aficionados. Hoy no es un día cualquiera. Hoy es el día al que todo futbolista teme enfrentarse, ese día que vemos en el horizonte, pero al que algún día debemos enfrentarnos. Hoy es el día en el que toca decir adiós", comenzó Biri su carta de despedida.

"Reconozco que ha sido una decisión muy difícil, muy meditada, pero gracias al apoyo de los míos podré matar ese gusanillo de vestirme de corto cada domingo. Durante estas últimas semanas he escuchado todo tipo de opiniones, he recibido propuestas para seguir jugando, pero reconozco que también es hora de formarse fuera del terreno de juego, ocuparme de mi familia y de ese pequeño que llegó al mundo para cambiar nuestras vidas".

"Ahora es tiempo de emprender una nueva etapa. Una etapa llena de ilusión y ganas, de formación, de ver y rodearse de grandes expertos para hacer de todos los jóvenes valores mejores jugadores y mejores personas".

"Quiero agradecer a todos los clubes, compañeros, entrenadores, directivas y aficiones el trato recibido durante todos estos años. En mi memoria quedan todas esas personas que me han ayudado desde pequeño a disfrutar de lo que más me apasiona, haciendo sacrificios indescriptibles para ayudarme a ser lo que hoy soy. Nunca tendré suficientes palabras de agradecimiento, pero, sobre todo, quiero terminar esta carta, recordando a tres personas que en esta inolvidable etapa han estado a mi lado tanto en las buenas como en las malas. Gracias PUPÁ BIRI , MAMÁ MARI y gracias a mi mujer. Hoy comienza una nueva etapa", acaba.