La piscina municipal de Castellar ha tenido que cerrar este martes de nuevo sus puertas después de que se hayan vuelto a encontrar heces en el agua. "Nuevamente nos hemos visto obligados a evacuar el vaso de la piscina municipal y activar el protocolo", anuncia el Ayuntamiento en su muro de Facebook.

"La falta de civismo de algunos sumado a la publicidad de otros está perjudicando a vecinos, visitantes y a la piscina municipal de Castellar de la Frontera", continúa el Consistorio, que pide "civismo y respeto a las personas que están haciendo estas fechorías" y la colaboración ciudadana para identificar a el o los responsables.

"La piscina municipal de Castellar es una instalaciones que a los chisparreros nos han costado muchos esfuerzos y recursos poder tener y es injusto el propósito de quienes quieren perjudicarlas", subraya el Consistorio, que ha encargado un nuevo análisis y abrirá este miércoles nuevamente la piscina al baño una vez realizados los controles oportunos. Desde el Ayuntamiento se van a estudiar medidas intensificar la vigilancia e instalar cámaras de vigilancia para intentar identificar a los culpables. 

Este verano se ha convertido en un reto viral por diversos lugares de España eso de defecar en las piscinas públicas, lo que no solo es un acto incívico, sino que también es peligroso para la salud por el riesgo de transmitir parásitos a través del agua. Hay localidades afectadas por todo el país.