Castellar

La piscina municipal de Castellar abre sus puertas este jueves tras el parón del pasado verano

  • El aforo se ha reducido a 400 personas y los grupos serán de un máximo de 10 personas

La piscina de Castellar.

La piscina de Castellar. / Ayuntamiento de Castellar

Este jueves, 1 de julio, arranca la temporada de la piscina municipal de Castellar de la Frontera después de que el verano pasado permaneciera cerrada debido a las restricciones para evitar la propagación del coronavirus. El alcalde, Adrián Vaca, y la teniente alcalde y concejal de Obras y Servicios, Tamara Trujillo, han recibido este miércoles a los tres socorristas que se incorporan a plantilla de manera temporal durante julio y agosto. La entrada este jueves será gratis hasta completar aforo. 

Para adaptarse a los nuevos protocolos preventivos y de seguridad, la principal novedad de la piscina este año es que no se podrán hacer pagos en metálico en taquilla. Por prevención y seguridad en materia sanitaria sólo se admiten pagos a través de datáfono, con tarjetas de crédito o dispositivos inteligentes con apps bancarias.

Del mismo modo, cambia el sistema de venta de bonos. Sólo se podrán adquirir en el Ayuntamiento, de lunes a viernes, en horario de 10:00 a 12:00. Otra de las principales novedades atiende a estos pases semanales y mensuales. Los bonos pasan a ser de siete y de 30 entradas y no son individuales; es decir, un mismo bono puede usarse hasta agotarse por una misma familia o un grupo de amigos. Asimismo, podrán usarse indistintamente de lunes a domingo durante los meses de julio y de agosto.

Los vecinos empadronados en el municipio podrán seguir adquiriendo su bono de miércoles gratis en el Ayuntamiento de Castellar de la Frontera.

Protocolo Covid

El aforo de la piscina municipal se ha reducido a 400 personas. Dentro del recinto se recomendará uso de mascarilla cuando las distancias interpersonales no puedan ser de 1,5 metros y no se permitirán grupos de más de diez personas.

Cada grupo de usuarios delimitará su espacio de recreo con unos conos que se repartirán en la entrada y tendrán que devolverse al abandonar el recinto municipal.

El alcalde ruega máxima responsabilidad a todos los usuarios y espera que, después de una temporada cerrada, la piscina abra al público con las mejores garantías.

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