La plantilla de NGS continúa en huelga y exige el convenio de Cepsa

La totalidad de la plantilla de Nueva Generadora del Sur continúa concentrada ante las puertas de la empresa hidroeléctrica como medida de presión ante la imposibilidad de llevar a un acuerdo definitivo en el convenio colectivo, que lleva dos años estancado.

Los trabajadores comenzaron su protesta a las 22:00 horas del pasado miércoles, tras acordarlo por unanimidad en una asamblea. "Alrededor de las 5.00 horas se tuvo que detener uno de los grupos electrógenos y el otro se ha parado finalmente pasadas las 11.00 horas", aseguró el presidente del comité de empresa, Manuel Fernández.

El comité de empresa indicóque la empresa pretende iniciar de nuevo la negociación del convenio, algo que los trabajadores no están dispuestos. "Nosotros queremos que nos dejen el convenio de Cepsa, con algunas puntualizaciones", argumentó Fernández, quién añadió que "vamos a hablar en las próximas horas con la Intercontrata y el comité de empresa de Cepsa para que nos echen una mano".

NGS está participada al 50% por Cepsa y Unión Fenosa, que desde el pasado día 4 es propiedad de Gas Natural. "Ese es el problema, no sabemos que va a pasar, ni quién lo va a comprar y por ello no quieren llegar a un acuerdo hasta que esta situación se resuelva", apuntó Fernández.

El comité de empresa es consciente de la posibilidad de ser denunciado por daños y perjuicios. Además, señala que la huelga de los trabajadores es indefinida hasta que haya un pronunciamiento por parte de la empresa. "Somos conscientes que podemos recibir las cartas de despido en las próximas horas", añadió Fernández. Según los trabajadores la cuestión de solvencia económica de la empresa no es discutible ya que sólo el pasado año NGS presentó unos beneficios netos de 38 millones de euros. La plataforma de los trabajadores pide un convenio colectivo basándose en el de CEPSA que incluye hasta 19 jornadas de trabajo menos al mes, mejores pluses de turno y un incremento de sueldo con respecto a las condiciones que ahora presentan además del abono de la tarifa eléctrica que está concedida en todos los convenios colectivos del sector.

Manuel Fernández añadió que la empresa ya ha tomado medidas, que pasan por traer personal de otras plantas para arrancar los grupos y que siga la producción, ya que tal como estaba ahorrarse ha puesto en peligro a los trabajadores y la salud de la maquinaria y las instalaciones, lo que se ha comunicado a la Inspección de Trabajadores.