Un documental de Movistar + pone voz al papel de la mujer en el narcotráfico en el Campo de Gibraltar
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'Narcas. Mujeres tras la droga' cuenta con tres episodios que trata la relación de las mujeres con el tráfico de drogas
El 5% de los teléfonos incautados en las cárceles españolas en 2022 fueron hallados en la de Algeciras
El narcotráfico es un negocio que mueve millones de euros en el Campo de Gibraltar. Dentro de este particular mundo, la figura del hombre es predominante, siendo los grandes nombres detrás de las redes masculinos. No obstante, un documental de Movistar + pone voz al papel de la mujer en los dos bandos de esta lacra.
"Es una suerte contar con auténticas expertas en narcotráfico, porque enfrentarse a organizaciones criminales de hombres siendo mujer no resulta nada fácil", reconoce en el primer episodio un mando (hombre) de la unidad más importante de la Policía Nacional en la lucha contra el tráfico de drogas.
Esas "auténticas expertas" van desfilando por Narcas. Mujeres tras la droga para, a través de ellas, conocer cómo se trabaja contra el narco, especialmente en el Campo de Gibraltar, donde no parece "agotarse" una actividad ilícita que ha obligado a desplegar en la comarca un amplio dispositivo policial donde las mujeres están teniendo un papel relevante.
Lo corroboran los testimonios de mujeres pertenecientes a la Policía Nacional, la Guardia Civil y Vigilancia Aduanera, algunas de ellas jefas de sus respectivas unidades o pioneras en lo "suyo", como la primera mujer que hizo el curso de piloto militar en el instituto armado. También en el lado de la Justicia hay pioneras en esta lucha, entre ellas Rosa Ana Morán, la primera fiscal Antidroga de la Audiencia Nacional.
Sus testimonios se alternan con imágenes recuperadas de intervenciones policiales en el puerto de Algeciras, en el mar, dentro de las embarcaciones, desde el aire... para acabar con este "supermercado" de la droga, como lo define una de las protagonistas del primer episodio.
"Todo se vive intensamente. Es muy rápido. Te sube la adrenalina cuando detectas una embarcación", reconocen algunas de las agentes, como aseguran también que es "imposible" no pasar miedo porque el mundo con el que se enfrentan es muy peligroso.
Además, como también queda reflejado en el documental, su lucha es contra hombres a los que les "duele" que sean ellas las que les detengan. Se sienten "humillados". Y si la que les arresta es una "jefa", aún peor. Los "malos" intentan ningunearlas, pero "ya no nos afecta", afirman en el documental.
En el lado de los "malos"
El documental ha querido adentrarse también el mundo de las "malas", las mujeres que, de una forma u otra, están con el narco. No son la "Reina de la coca", ni tampoco Esther Lago, la que fue mujer del narcotraficante gallego Laureano Oubiña y que llegó a jugar un papel importante en las finanzas de este histórico narco, pero son mujeres con funciones específicas dentro de las organizaciones aunque aún en escalones muy bajos.
La producción ha conseguido que hablen algunas "punto" (las que se dedican a observar a la Policía y avisar a sus 'jefes'), "chocheras" o "mulas" que transportan droga y traficantes.
El rol de las mujeres dentro de las organizaciones criminales lideradas por españoles se está situando cada vez más en escalones más elevados. Por el contrario, como se señala en el documental, en las redes de narcos encabezadas por magrebíes o por personas del Este de Europa no es fácil encontrar mujeres.
"Subir el otro peldaño, llegar a la cima y convertirme en patrona". Ese es el deseo de una de las que han querido participar en el documental y que, por razones obvias, sale encapuchada.
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