Campo de Gibraltar

Suspenden el juicio tras el recurso de la secretaria por delitos graves

  • Núñez de Cossío pedirá una orden de alejamiento y Mayoral solicitará el archivo del procedimiento

El juicio rápido contra el concejal del PIVG, Jesús Mayoral, por "supuesta agresión física y verbal" a la secretaria municipal, Ana Núñez de Cossío, quedó ayer suspendido. El letrado de la habilitada nacional presentó un escrito en el que recurre el juicio por delito de faltas al considerar que los hechos denunciados revisten de mayor gravedad y deben ser juzgado por lo Penal.

A su vez, Jesús Mayoral, que denunció a la secretaria por denuncia falsa, señaló que también recurrirá y solicitará el archivo de la causa.

Ahora ambas partes tienen plazos de tres y cinco días para presentar los recursos de reforma y apelación pertinentes.

Núñez de Cossío y Mayoral estuvieron en el juzgado toda la mañana con varios testigos, donde coincidieron con los 59 okupas de Puente Mayorga. Ambos salieron pasadas las 15:00 horas.

La habilitada nacional explicó que su defensa había recurrido porque es un hecho grave, al considerar que se produjo una "detención ilegal de un funcionario".

"Son delitos más graves porque me cerró la puerta, me empujó, me intimidó y pasé miedo", señaló Núñez de Cossío, quien reveló que quiere solicitar una orden de alejamiento. "Esta situación viene de lejos, se dedica a insultarme y vilipendiarme cuando mis decisiones no le interesan. Que denuncie en los juzgados pero que no me insulte ni menosprecie al personal del Ayuntamiento", señaló la funcionaria, quien acudió al juzgado con un parte de lesiones.

"Tengo lesiones en un hombro y me dieron un tranquilizante en el centro de salud. Eso ocurrió cuando me metí en mi despacho y no me dejó salir, se puso delante y no me dejaba abrir la puerta, forcejeé con él y después de varios intentos salí. Mis compañeros son testigos, vieron una parte y querían llamar a la Policía", explicó la secretaria.

Antes de esta situación, la discusión se inició cuando el concejal del PIVG acudió a las dependencias para ver los expedientes de los consejos de las empresas municipales que se habían celebrado antes. "Él ya no es consejero y no puede verlos. En cumplimiento con mis funciones le pedí por favor que abandonara la sala y me fuí a mi despacho y posteriormente él abrió la puerta del despacho de forma violenta y me decía que mi obligación era atenderme y que iba a buscar al alcalde", señaló.

Para la otra parte, la situación fue totalmente diferente. Mayoral y sus testigos insistieron en que no había existido ninguna agresión y añadieron que tan sólo estuvo en el despacho un minuto o minuto y medio y "todo lo que cuenta supone muchísimo más tiempo".

"Yo me encuentro tranquilo", señaló Mayoral, "especialmente porque la jueza, una mujer, ha considerado que es un delito leve". Además, argumentó que al haberse suspendido, tendrá más tiempo para poder defenderse con un abogado, ya que ayer a diferencia de la secretaria acudió sólo con una testigo, una consejera de las empresas municipales que estuvo presente cuando se produjeron los hechos.

Una vez se resuelvan los recursos volverán a citarles para el juicio.

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