El Ayuntamiento de San Roque se comprometió ayer a aplicar en 2019 una reducción de dos puntos en el tipo del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), lo que lo rebajaría del 0,42 al 0,40, el mínimo que fija la Ley. Este es uno de los cinco grandes retos que el alcalde, el socialista Juan Carlos Ruiz Boix, marcó para el futuro más inmediato de la ciudad. Lo hizo durante un acto, celebrado en el Palacio de los Gobernadores, en el que, como es tradicional, realizó un balance de su gestión en presencia de toda la corporación municipal y representantes de distintos colectivos de ciudadanos.

Ruiz Boix explicó en primer lugar que el Ayuntamiento pretende contribuir a la tendencia a la baja del desempleo en la ciudad con la contratación de más de 200 personas a través de los planes de trabajo de temporada de Emadesa, además del que hay previsto para personas con discapacidad a través de Amanecer. "El paro, nuestra principal preocupación y el objetivo prioritario de todas nuestras políticas, contabiliza hoy casi 900 parados menos que hace tres años por estas fechas y casi 1.600 parados menos que cuando alcanzamos el pico más alto de esta crisis, en noviembre de 2012", manifestó el regidor sanroqueño, que resaltó que más de 600 personas han tenido un contrato vinculado al Ayuntamiento en los últimos tres años. A estas cifras hay que sumarles el empleo que se derivará del sector de la Construcción, que recibirá un impulso a través de los más de diez millones de euros de inversiones previstas que eleván el montante total al final del mandato "a una cifra más cercana a los 25 millones que a los 20".

Más dinero para políticas sociales y fomento de la participación ciudadana, entre los objetivos

El cuarto objetivo se refiere al "incremento de las partidas destinadas a políticas sociales". "Potenciaremos las nuevas ayudas para los estudiantes de Primaria y Secundaria con menos recursos; culminaremos la primera fase de las nuevas viviendas tuteladas de la Alameda y avanzaremos en la construcción de la nueva Residencia Asistencial de Huerta Varela, con capacidad de 100 plazas para mayores. Y, desde luego, vamos a seguir impulsando desde todos los ámbitos las políticas de género con la aplicación del I Plan de Igualdad entre Hombres y Mujeres puesto en marcha en este último año", manifestó Ruiz Boix.

Como quinto y último reto, el alcalde estableció "el compromiso de fomentar la Participación Ciudadana, también a la hora de compartir decisiones y demandas", así como la creación de nuevos espacios de encuentro y ocio en todos los distritos, "porque es allí donde se debate la actuación municipal". "Los 30.000 sanroqueños tienen algo que decir durante todo el mandato, no sólo una vez cada cuatro años, cuando depositan su voto", subrayó.

El alcalde sanroqueño se refierió a la consolidación de los proyectos que han convertido a la ciudad en la "capital cultural del Campo de Gibraltar", caso de la la Bienal de Flamenco Canela de San Roque; el Curso de Verano de la UCA; la rehabilitación del antiguo ayuntamiento y la construcción de la nueva sede de la Universidad Popular en Huerta Varela, lo que supondrá una inversión de 2,5 millones de euros. También se comprometió también a que el Ayuntamiento seguirá liderando la oposición al fondeadero exterior que prevé la Autoridad Portuaria Bahía de Algeciras (APBA) en la costa del Valle del Guadiaro, "porque atenta contra el turismo ligado al golf, al polo y a la vela", una de las dos grandes fuentes de riqueza del municipio junto a la industria.

Por último, Ruiz Boix se mostró convencido de que el nuevo Gobierno de España "va a ser más sensible" que el anterior con cuestiones como la modernización del trazado ferroviario Algeciras-Bobadilla, la ejecución de la segunda fase del Paseo Marítimo de Torreguadiaro o "el arreglo de ese punto negro que supone el Cruce del Toril".