El entrenador de la Real Balompédica, Baldomero Hermoso Mere, calificó de “justo” el empate que su equipo cosechó este domingo en su visita a Lepe, lamentó que sus futbolistas no demostrasen “más destreza” en el apartado ofensivo y elogió la actuación de su guardameta, Facundo Ackerman, de quien dijo que había realizado “intervenciones cruciales”.

“No volvimos satisfechos, porque necesitábamos ganar, pero al mismo tiempo sabemos de la dificultad que entrañaba este partido”, analizó. “Creo que el resultado fue justo, tuvimos nuestras ocasiones y también las tuvieron ellos”.

“La primera parte fue más fría, más parada, cerrada”, reconoció. “El San Roque tiene un sistema muy particular, pocos equipos de la categoría juegan como lo hacen ellos, y lo cierto es que la única ocasión de esta primera parte fue nuestra, por medio de Fran Carbià, que la sacó Gato Romero”.

“En la segunda parte, sobre todo en los últimos quince o veinte minutos los dos equipos acusamos el cansancio y quisimos ganar, se convirtió en un partido de ida y vuelta y los dos porteros y la madera [en referencia al disparo de Diego Jiménez a la escuadra] fueron los que evitaron que hubiese algún gol”, analizó.

“Nos hubiese gustado controlar mejor los ataques de ellos en la segunda parte, pero como queríamos atacar asumimos el riesgo de que viniesen de vuelta y en ese momento cualquiera pudo ganar”, asumió.

“En estos momentos en la clasificación no hay grandes diferencias y los números del San Roque de Lepe no nos decían nada”, abundó. “Sabíamos que es un equipo bien trabajado, que compite muy bien, muy por encima de lo que dice la tabla y que ganar en ese campo es complicado, aunque lo consiguiese el Estepona”, abundó.

Mere calificó de “enorme” la actuación del guardameta Facundo Ackerman, de quien dijo que había llevado a cabo “intervenciones cruciales” que “evitaron goles”.

“Creo que en general hicimos un buen partido en el apartado defensivo, aunque nos faltaron cosas en el ofensivo, Eché en falta más destreza ofensiva por nuestra parte y así se lo transmití a los jugadores”, lamentó el míster, que se quejó de algunas de las amonestaciones que habían visto sus futbolistas. aunque aclaró que el árbitro no había tenido una responsabilidad directa en el marcador final.