La expulsión de la que fue objeto el futbolista congoleño de la Real Balompédica Kaya este sábado en Sevilla, apenas 15 segundos después de saltar al terreno de juego, no es la más rápida de la historia. Ese dudoso honor lo ostenta el británico David Pratt, que se fue a la calle a los tres segundos de iniciarse una contienda.

Desde luego no sirve para relajar tensiones en el entorno de la Real Balompédica Linense, muy caldeado después del empate que su equipo concedió el sábado al Sevilla Atlético al encajar un tanto en el minuto 91’, después de haber jugado desde el 56’ con un hombre más por expulsión de Juanpe. 

Buena parte de culpa de lo sucedido en el desenlace del choque –evidentemente no hasta entonces– la tuvo el internacional congoleño Faites-Prevu Kaya Makosso Kaya que fue expulsado con roja directa quince segundos después de saltar al campo por golpear con el codo en un salto al jugador local Álex Robles, precisamente el autor del tanto de la igualada. Muchos aficionados se preguntaron ayer si era la expulsión más rápida de la historia. La respuesta es no. 

Existe el riesgo de una sanción de dos partidos

El colegiado del encuentro, el jiennense Guzmán Mansilla explicó en el acta que le mostró la roja directa al jugador balono por “golpear con el codo a un contrario con uso de fuerza excesiva, estando el balón en juego y a disputa entre ambos jugadores”. Lo cierto es que entre esa acción, que le puede suponer dos partidos de sanción, y su entrada en el terreno de juego habían transcurrido 15 segundos.

Marca, en su edición digital escribía: “¿Cuál es el menor tiempo en el que puede ser expulsado un jugador en un partido de fútbol? Tres segundos. Eso fue lo que tardó David Pratt en abandonar el terreno de juego tras ver la cartulina roja. El jugador, que milita [se entiende que en el momento de su expulsión] en el Chippenham Town de la Southern Premier League, realizó una dura entrada a un rival del Bashley a los tres segundos de partido y el árbitro no dudó en mostrarle la cartulina roja”.

“De esta forma, David Pratt ha batido el récord de ver la tarjeta roja más rápida de la historia en el fútbol profesional. Pratt batió la marca que tenía en su poder Giuseppe Lorenzo, que cuando militaba en las filas del Bolonia italiano vio la cartulina roja a los diez segundos en 1990 por agredir a un contrincante”, añadió.

“En Inglaterra, el récord estaba en poder del guardameta Kevin Pressman, del Sheffield Wednesday, expulsado a los 13 segundos por tocar con la mano el balón fuera de su área, en el año 2000”, agregó.

“Ese mismo año, se instauró el récord en el fútbol amateur, cuando Lee Todd se marchó directamente a los vestuarios a los dos segundos de partido al insultar al colegiado del encuentro cuando éste pitó el inicio del choque”, concluía la información.