Javier Baglietto regresa a la directiva de la Real Balompédica Linense. Es más, esa vuelta a casa ya se ha consumado, aunque por cuestiones de protocolo aún no haya sido presentado de manera oficial. Su labor principal volverá a ser la de coordinar el apartado referido al marketing y la organización de eventos. También ha quedado confirmado que Carlos Guerra seguirá ejerciendo las funciones de segundo entrenador, ahora como mano derecha de Miguel Rivera, quien fue presentado este jueves como nuevo preparador de los albinegros.

El propietario, Andrés Roldán, ha convertido en pilar principal de su gestión al frente de la Balona que el club cuente en su estructura con el mayor número posible de linenses. “Siento la necesidad de incorporar gente de La Línea, porque la Balona debe ser de los linenses", dijo en su última comparecencia pública.

El máximo accionista comenzó entregando la dirección deportiva al experimentado dirigente Mario Galán, si bien es cierto que éste ya realizada otras funciones dentro del club. Y el segundo paso ha sido cerrar un acuerdo para que Javier Baglietto (Javivi, como se le conoce cariñosamente) regrese a la entidad para desempeñar las funciones que ya llevó a cabo bajo -con notable éxito por cierto- durante el mandato del añorado Alfredo Gallardo y también, aunque de forma más breve, bajo la gestión del empresario italiano Raffaele Pandalone.

Suyo será el marketing, la responsabilidad de la campaña de abonados y de diferentes eventos que irán salpicando la temporada.

Le avalan sus éxitos en su etapa anterior, su reconocido balonismo y que en realidad nunca se ha desvinculado del todo del club, ya que ha trabajado muy de cerca con su filial, el Atlético Zabal.

Javier Baglietto ya estuvo presente este jueves en la presentación oficial de Mario Galán y Miguel Rivera, pero el club decidió que no se hiciese público su fichaje, cuyo anuncio es inminente.

Carlos Guerra

Carlos Guerra, durante un entrenamiento

La otra decisión que ya está tomada es la que se refiere al segundo entrenador. En este caso no habrá cambios, pero sí que seguirá desempeñada por un linense y además un balono confeso y más que demostrado: Carlos Guerra.

El exfutbolista ya ha mantenido un primer contacto con Miguel Rivera y Mario Galán para comenzar a perfilar la ida sobre la composición de la futura plantilla y los detalles de una pretemporada que se antoja muy lejana pero que el fútbol demuestra que debe ser preparada con tiempo.

Todo indica que la de Carlos Guerra no será la única renovación que se producirá dentro del cuerpo técnico y de aquellas personas que rodean la actividad diaria de la plantilla.