La Real Balompédica Linense ha tomado varias decisiones con respecto a su cantera a la hora de confeccionar la lista de jugadores que completarán la pretemporada con el primer equipo. La más llamativa es que el punta algecireño Álex García, que durante la segunda vuelta del pasado curso tuvo licencia de Primera RFEF, iniciará la 2022-23 con ficha del filial. Además, el delantero jerezano Pablo López, que el curso pasado militó en el Atlético Sanluqueño de la División de Honor juvenil, será sometido a una prueba durante este periodo de preparación.

La Balona arrancará el martes su pretemporada con 25 jugadores entre los que están tres chicos del filial (el portero guadiareño de origen boliviano Diego Mercado, que ya fue citado a Andorra el curso pasado; el centrocampista Daniel Bolaino Bola y el atacante Javi Méndez, que ha disputado dos encuentros en la tercera categoría nacional) además de un Alu Koroma que regresa tras cesión y que ha descollado en la UD San Pedro y de algún otro futbolista que pueda sumarse de manera ocasional por decisión de los técnicos.

La mayor sorpresa -por lo inesperado- en esa lista es el jerezano Pablo López, un delantero nacido en Jerez en enero de 2004 y que tras pasar por la cantera del Sevilla el curso pasado defendió los intereses del Atlético Sanluqueño. El club deberá pronunciarse sobre su incorporación a la vista de su rendimiento.

Por el contrario no estará Álex García, que en enero se incorporó al primer equipo, con el que apenas jugó unos minutos de manera testimonial en la visita al Sevilla Atlético y que el cuerpo técnico entiende que debe jugar en el filial para disfrutar de minutos y, si llega el caso, jugar en Primera Federación.