La 'movida' da un giro más céntrico

Los puntos neurálgicos de la oferta de restauración y del ocio nocturno han ido desplazándose poco a poco en los últimos años. Se podría decir incluso que ha tendido a reunificarse en apenas dos o tres calles y muy cercanas entre sí. Especialmente han salido ganando las céntricas Alfonso XI y Sevilla y la plaza Verboom y sus aledaños en el centro de la localidad. Este cambio en las costumbres ha sido tan sutil que se podría decir que ni ha afectado al ocio nocturno y mucho menos a los ciudadanos.

Un ejemplo claro está en el Secano, una calle totalmente viva hace una década con más de cinco o seis locales abiertos cada noche para los jóvenes y que ahora muestra fachadas cerradas, con carteles de "se alquila" y donde solo resisten los que mantienen abiertas sus puertas como cafeterías o cervecerías de toda la vida.

Este aura negativa empresarial también lanzó sus garras para herir de muerte al pasaje de Fuentenueva y desde hace más de un año la sala que siempre se recordará por la mítica Generatriz está cerrada y, además, en proceso de desmantelación. A duras penas se mantienen los locales de alrededor, algunos a fuerza de incondicionales por su marcado estilo independiente. En este caso el "nuevo Secano" podría considerarse la plaza de Andalucía, donde han ido proliferando pequeñas cafeterías, algunas de ellas que mantienen sus puertas abiertas hasta bien entrada la noche.

Entre tanto reajuste y descalabro de negocios se atisba la incipiente resurrección de la calle Trafalgar que, quizás por su jugosa localización, nunca ha peligrado del todo. De hecho en la pasada Gerencia de Urbanismo se concedió licencia para abrir un nuevo local con música en esa citada vía que une la calle Convento y la avenida Virgen del Carmen. Y todo ello sumado a las inversiones privadas que tanta falta han hecho durante años.

Como ejemplo de este crecimiento del ocio y la restauración, la concejalía de Medio Ambiente de Algeciras ha tramitado en lo que va de año 34 expedientes para abrir locales de espectáculo, en concreto cinco cafeterías, doce bares, cinco bares-cafeterías, un bar-restaurante, un bar con música y diez restaurantes.

A ello hay que sumar la ampliación continua de negocios, auspiciadas por las buenas temperaturas del sur. En concreto la concejalía de Seguridad Ciudadana ha autorizado, igualmente en lo que va de ejercicio anual 2015, diez terrazas y la ampliación de otras tres que ya contaban con ese permiso.

En cuanto a la reordenación de los locales de ocio, hay que destacar cómo se ha mantenido la oferta en la plaza de la Merced de la calle Convento o cómo algunos empresarios han sabido leer la necesaria renovación. A este auge se suma el corte de tráfico que se propicia cada fin de semana en este céntrica vía, impulsado por el Ayuntamiento de Algeciras, para posibilitar que los bares instalen sus terrazas. De hecho se ha dado licencia para la futura apertura de una hamburguesería en Alfonso XI.

Sin duda alguna se ha convertido esta zona en el corazón de la restauración, seguido muy de cerca por la calle Sevilla, que también ha vivido un brote de nuevos negocios y muchos arriesgados con ofertas gastronómicas diferentes; y en paralelo ocurre de forma casi semejante con la plaza Verboom, que de tener un solitario restaurante ha pasado a albergar varias pizzerías y bares de diferentes estilos, así como cafeterías que abren día y noche junto pubs de referencia.

Quedaron muy atrás esas largas caminatas hasta el Secano, ahora todo está más cerca, más accesible, todo más reunificado. Los pubs cubren una oferta necesaria que arranca desde primera hora de la tarde hasta las cuatro de la madrugada. Actualmente el déficit está en las discotecas, que de nuevo se ha quedado en una ínfima oferta, pero hay visos de futuras aperturas. Y es que la movida nunca deja de girar.