El centro de día de la calle Prim ultima las obras de rehabilitación

Las personas mayores podrán volver a disfrutar en breve de las actividades e instalaciones que ofrece el centro de día ubicado en la céntrica calle Prim. La directora, Mamen Gallardo, confía en que a mediados de enero, puedan reanudarse los programas que ofrece el centro, dependiente de la Junta de Andalucía.

Todo va a depender de que las obras de rehabilitación que se están ejecutando en estas instalaciones concluyan a tiempo y poder así ofrecer a partir del próximo mes a esas personas la atención a la que están habituados desde hace muchos años. De hecho, desde que en julio empezaran los trabajos, los mayores han tenido que renunciar a una serie de actividades que se llevan a cabo en dicho centro.

"Llevan muchos meses esperando, pero no hemos tenido más remedio porque la obra representaba un peligro a la hora de subir y bajar de la primera planta", que no se ha reformado, señaló Gallardo. Con todo, durante este tiempo se han seguido organizando curso de natación y de gimnasia en la piscina municipal o excursiones, como el que hoy realizan a Málaga o viajes con su coro.

Las obras afectan a unos 181 metros cuadrados de instalaciones y ha contado con un presupuesto de 100.000 euros, según indicó la delegada provincial de la Consejería para la Igualdad y Bienestar Social, Manuela Guntiñas. Los trabajos han afectado a la planta baja habiéndose reformado la cocina, con un barra de bar nueva, el salón del comedor, donde se ofrecen las comidas mediante un convenio firmado con la Fundación Andaluza o los aseos, uno de ellos para minusválidos. En la parte de abajo, los mayores disponen de un salón, donde se puede ver la TV o comparten tiempo con sus "amigos". Mamen Gallardo destacó el importante papel del centro porque aquí "les sirve de lugar donde estar con más gente y participar en actividades y así no se encuentran solos en sus domicilios".

Son 13.000 los mayores que están asociados, aunque no todos participan de sus programaciones, aunque hay socios colaboradores en la organización de actividades. Una vez que se recepcione la obra y se reinicien las actividades, estas personas podrán volver a disfrutar de los talleres de memoria, para el que ya hay una lista de al menos 80 socios o Tai-Chi, al que esperan incorporarse unas 110 personas.

Otras actividades se dirigen al baile de salón, sevillanas, pintura, manualidades pero también disponen de un rincón para poder jugar al billar, el ajedrez, cartas, dominó o parchís. A esto se unen proyecciones de cine que ofrece Caja Madrid o charlas organizadas por la Caixa, entre otros. El papel de los monitores es muy importante en la atención a estas personas que además pueden optar por una terapia de grupo .