La mesa de contratación del Ayuntamiento de Algeciras ha propuesto que la empresa malagueña Jaralia Integral sea la adjudicataria del proyecto que transformará la calle de Ojo del Muelle, entre la avenida Virgen del Carmen y el tramo de Cánovas del Castillo que da acceso al mercado Ingeniero Torroja, por un importe que roza los 204.000 euros, más IVA.

La obra, cuyo concurso había quedado desierto en 2020, está financiada por la Diputación Provincial de Cádiz, que aprobó obras para Algeciras por importe de 5.000.000 euros procedentes del reparto de remanente de la tesorería para gastos generales.

El expediente se ha tramitado por la vía urgente ya que, al tratarse de un contrato no adjudicado, era preciso acelerar su tramitación por razones de interés público, según explicaba el anuncio de licitación.

Con esta actuación se pretende la transformación de un espacio que se encuentra actualmente muy degradado y que soporta un elevado tránsito rodado y peatonal, al ser una de las principales vías de conexión entre la avenida Virgen del Carmen y la plaza de abastos.

"El proyecto supone la actuación en unos 70 metros lineales, a los que se otorgará una nueva disposición de acerados y de zonas destinadas a aparcamientos de motocicletas, suprimiendo las deficiencias actuales que atañen al tránsito peatonal e imagen urbana", informa el Ayuntamiento de Algeciras en una nota de prensa.

El Consistorio plantea ajustar el ancho de la calzada a las necesidades del tráfico rodado, lo que supone reducir su tamaño actual y convertir el exiguo acerado en otro de dimensiones adecuadas al tránsito peatonal que soporta la calle. Igualmente se plantea modificar la "distribución caótica" de la pequeña plaza, frente a la pescadería Antonio Martín, posibilitando su transformación en una zona arbolada y con bancos.

Esta actuación resuelve también la evacuación de pluviales, incluye la renovación del alumbrado público y de todas las infraestructuras, y el soterramiento de las conducciones aéreas de las distintas instalaciones que tanto afean las calles y les proporcionan un aspecto anticuado.

Con el fin de promover la sostenibilidad medioambiental y la reducción de la contaminación, se instalará un pavimento específico que, además de cumplir con su función arquitectónica y estética, contribuirá activamente a la eliminación de elementos contaminantes.

Para la ejecución de las obras se estima un plazo de tres meses.

La calle Ojo del Muelle tiene interés patrimonial, ya que en el pasado era la zona de conexión del muelle con las atarazanas medievales, destacando que mantuvo hasta entrado el siglo XX un arco ligeramente apuntado de estilo árabe, destruido en el siglo XX, y que pudo corresponderse con la Puerta del Mar citada en las crónicas.