Año electoral, presupuesto en expansión. El Ayuntamiento de Algeciras ha aplicado la máxima presupuestaria en su proyecto de cuentas para el próximo año con un leve aumento del gasto (7,4%), hasta llegar a los 108 millones de euros. Más gasto social para la aplicación de la ley de dependencia, más inversión con el apoyo de nuevo de fondos europeos y nueva maquinaria de limpieza se llevarán la mayor parte de los 7,5 millones extra con los que contará Algeciras el próximo año, un aumento sustentado en la mayor recaudación por impuestos y tasas y un aumento de las transferencias.

Con las urnas a la vuelta de la esquina, casi 9 millones se reservan para inversiones en obras, equipos y renovaciones varias. Entre ellas destaca, como nueva incorporación, la remodelación de la avenida de Bélgica y la playa de la Concha, 1,2 millones para los que se han solicitado fondos ITI (europeos y de la Diputación Provincial), mientras que la segunda mayor partida (1,1 millones) irá destinada a la muy necesitada reparación de acerados en varias zonas de la ciudad.

El barrio de La Caridad vuelve a destacar en el presupuesto gracias a los fondos europeos que provienen de la Estrategia Edusi para la zona: se abordarán mejoras en las calles Miguel Martín y Cayetano del Toro (actuación que ya se incluía en las cuentas de 2018) por casi medio millón de euros, mientras otros 400.000 se destinarán a renovar el acceso por la plaza Juan de Lima.

Otra de las grandes partidas (526.000 euros) es la destinada a la construcción de la escuela infantil Isabel Benítez Aranega, la guardería del Saladillo, mientras que otros 446.000 euros se destinarán a las obras para renovar el drenaje y el tartán de las pistas de atletismo Enrique Talavera. En ambos casos, son inversiones arrastradas del presupuesto de este año, en el que se han iniciado.

Diez coches y chalecos antibalas para la Policía Local, obras en San Isidro y el Rinconcillo y la reforma del mercado Hotel Garrido forman parte de un listado de inversiones en el que se hace un guiño a los más jóvenes con partidas para ampliar las pistas de skate, habilitar una de pumptrack (un circuito que se puede recorrer completamente con una bicicleta sin la necesidad de dar pedales) y otra de parkour. También hay una partida de 61.000 euros para arreglar la cubierta del polideportivo Manuel Marín Periquito de La Piñera, sobre la que hace dos días alertaban los usuarios por las goteras aparecidas con las lluvias. Y se mejorará el alumbrado de varias calles o se construirán nichos y tumbas en el cementerio de Botafuegos, donde se renovará el horno.

“Son unos presupuestos equilibrados y austeros”, ha destacado el alcalde de Algeciras, José Ignacio Landaluce, durante la presentación de las cuentas. El equipo de gobierno popular ha hecho de la austeridad y la contención presupuestaria uno de sus mantras, haciendo bandera de la reducción año a año de unas cuentas forzadas a ello por la situación económica del Consistorio. “Nuestra filosofía es dar los mejores servicios al menor coste”, ha añadido el regidor, para a continuación hacer un alegato sobre la disminución de la presión fiscal durante sus dos mandatos y la reducción del gasto corriente y de personal (la plantilla municipal ha pasado del millar de trabajadores a 710 amortizando plazas).

El regidor también ha hecho hincapié en el aumento del gasto social (9 millones en total), derivado del incremento de la partida para ayuda domicilio por el mayor número de beneficiarios de la ley de dependencia. “Lo importante es que seguimos priorizando en el gasto a los más necesitados”, ha señalado para añadir: “Y para promocionar el empleo”.

Ese crecimiento del gasto es posible por un aumento en los ingresos pese a que solo se prevé un incremento en la tasa de la basura, remarca el teniente de alcalde de Hacienda, Luis Ángel Fernández. El crecimiento en los cobros de impuestos y tasas viene, explica, por un incremento de los padrones fiscales. También aumenta la transferencia que la Junta de Andalucía hace para el servicio de ayuda a domicilio, pagado casi a partes iguales entre ambas administraciones.

La deuda se sitúa, señala Fernández, en el entorno de los 205 millones de euros, dentro de poco prácticamente solo de deuda bancaria tras las operaciones autorizadas por el Gobierno central para facilitar el pago a los proveedores que tenían facturas pendientes.

“Somos el equipo de gobierno más austero de la democracia”, ha insistido el alcalde, comparando los recibos del IBI, el gasto corriente y de personal o los gastos financieros de 2008 (cuando la crisis aún no había hecho mella) y actuales. Los presupuestos también sirven para hacer campaña: “Es bueno que los ciudadanos reflexionen y comparen, porque van a tener que comprar dentro de poco”, ha bromeado Landaluce.