El pan es uno de los alimentos más universales. En todas las civilizaciones se hace pan, con sus propias características con o sin levadura, con diferentes harinas, como acompañamiento de otros alimentos o como plato principal, relleno, solo…Y mantener las características que hacen diferente a cada uno de los panes es fundamental para preservarlos.

En Granada hay un pan que tiene nombre propio. Hablamos del pan con IGP Pan de Alfacar. Sus características vienen dadas del lugar de donde toma el agua para su elaboración, un manantial de la zona – los municipios de Alfacar y Víznar- que posee un sabor muy característico, menos dulce que otras aguas de la provincia, y de la harina empleada, con un nivel determinado de fuerza, logrando dar volumen y flexibilidad al producto. El auténtico Pan de Alfacar se diferencia por su corteza gruesa y dorada, sin exceso de harina en su interior y de miga suave y blanda. Es todo un manjar.

Desde la IGP Pan de Alfacar ponemos en marcha un proyecto, de la mano de la Diputación de Granada para poner en valor la calidad y excepcionalidad de este pan. No todos los lugares donde leemos “Hay pan de Alfacar” nos ofrece el verdadero. Para que el producto sea el auténtico, amparado con el sello de calidad IGP Pan de Alfacar, es necesario que haya sido elaborado con una buena masa madre.

Los porcentajes de cada ingrediente, su correcta renovación y, por supuesto, la paciencia del panadero, se convierten en el secreto para obtener un pan perfecto. Se elabora con harina de trigo, masa madre natural, agua del manantial de Alfacar, levadura y sal. El resultado de la perfecta mezcla de ingredientes de calidad logra un pan crujiente y con resistencia, digno de poseer un sello de calidad diferenciada.

Si los ingredientes son importantes, no menos lo son las herramientas empleadas por el panadero. Hay que usar recipientes de madera para panaderías ya que estos transpiran y no dañan la masa durante la fermentación. Y llega el momento del horneado, que debe ser lento y a temperatura constante para conseguir un pan equilibrado. Se tarda entre dos horas y media y cuatro, en elaborar un pan de Alfacar artesano, desde el amasado de los ingredientes hasta el final de su cocción. Un pan aromático y crujiente.

Formatos

Los formatos del pan de Alfacar son 4: bollo, rosco, rosca y hogaza, obtenidos a partir de una misma masa de origen.

Se diferencian del resto de panes del mercado gracias a un sello que el maestro panadero estampa en cada pieza y que lo identifica como el auténtico pan de Alfacar.

Para que el pan pueda llevar este sello, tiene que cumplir todos y cada uno de los requisitos de la Indicación Geográfica Protegida y si no cumple alguno, no puede considerarse pan de Alfacar.

Por ello, la IGP ha apostado por este proyecto, que, de la mano de la Diputación de Granada, consiste en la instalación del distintivo de la IGP en aquellos municipios en los que exista una empresa perteneciente a la misma, de manera que sirva como estimulante para su consumo por parte de la población general y como reclamo para aquellas empresas interesadas en formar parte de esta indicación. Este proyecto se prolongará hasta el mes de junio de 2023.

Tradición de maestros panaderos

La larga tradición de maestros panaderos de la localidad granadina ya no sólo es conocida y respetada en Granada y alrededores, sino que traspasa las fronteras de la provincia. Alfacar es ya referencia de la panadería y la pastelería de la Comunidad Andaluza gracias a la Indicación Geográfica Protegida del pan.

Otra de las labores del Consejo Regulador de la IGP Pan de Alfacar es garantizar la trazabilidad del producto, desde la producción hasta su comercialización, y a la vez mejorar la imagen de los establecimientos asociados diferenciándolos del resto con señales de identidad claramente definidas. La promoción del producto es la herramienta para trasladar las características únicas de este producto a los consumidores.

Las panaderías en las que encontramos Pan de Alfacar de la IGP son Panadería Horno de Gabriel S.L., Panadería Pastelería San Juan S.L., Panadería Enrique Fernández e hijos S.L, Panadería Eduardo Vílchez S.L., y Mariano Moreno Caballero (Pan de Mariano).