Surban: sabor del sur con alma canalla en el corazón de Algeciras
Ubicado en la plaza Neda, este bar urbano y fresco reivindica la tradición andaluza con platos dinámicos, identidad sureña y mucha originalidad
Helado de tarta de queso y vistas al mar: un dulce paseo por el Campo de Gibraltar
En pleno centro de Algeciras, la plaza Neda se ha convertido en punto de peregrinación gastronómica gracias a un local que no pasa desapercibido: Surban.
Con un nombre que ya juega a mezclar lo urbano con lo andaluz, este bar propone una experiencia que va más allá de lo culinario. Su lema, "despringando la pringá", es toda una declaración de intenciones: reinterpretar la cocina del sur con descaro, humor y una mirada actual.
Surban se inspira en esa Andalucía de luz, gazpacho y montaítos, pero también en la que se lanza a la calle con alegría, sin perder nunca el pulso a su identidad. En su carta, de temporada y en constante evolución, se nota la conexión directa con la despensa local: la plaza de Abastos se convierte en una juguetería diaria para su cocina, donde el producto fresco es el protagonista.
El concepto es claro: respetar la tradición sin traicionar la originalidad. Y eso se traduce en platos que combinan lo clásico con lo inesperado, en presentaciones que invitan tanto a compartir como a fotografiar, y en sabores que conectar con la memoria pero sorprenden al paladar.
Pan árabe relleno de carne de pollo con especias africanas y su mahonesa (brioche africanito), la fusión peruano-japonesa con el ceviche de pescado local con leche de tigre nikkei (ceviche de la Nury) o todo un reclamo de este local: el cruasán de la Patri. Croissant del Okay relleno de tartar de solomillo de novilla cortado a cuchillo con mayonesa de kimchee. Todo delicias.
Si hay un momento perfecto para visitar Surban, es este miércoles. Coincidiendo con el día internacional de la tarta de queso, este 30 de julio, uno de sus postres estrella brilla con luz propia. Su famosa tarta de queso al estilo Cañadío, cremosa y ligeramente tostada por fuera, se ha convertido en la excusa favorita de quienes buscan cerrar la velada con un toque dulce y memorable.
Así es Surban: un homenaje al sur, pero con irreverencia, donde cada plato es una invitación a quedarse un rato más.
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