El faro de la Isla de las Palomas, la torre vigía símbolo del Estrecho

Una de las imágenes más características de la Isla de las Palomas de Tarifa es su faro, una torre vigía que recibe el mismo nombre que el emplazamiento en el que se encuentra y que cuenta con unos cinco siglos de historia.

En un primer momento, esta infraestructura fue una torre almenara. La construcción de la estructura defensiva se llevó a cabo durante el siglo XVI, siendo partícipe del plan de Felipe II para fortalecer la vigilancia de la costa, pues, por su situación en el extremo más al sur del sur de la Península, la torre tenía unas vistas privilegiadas del Estrecho que permitían detectar las posibles incursiones enemigas desde sus 17 metros de altura.

El edificio tarifeño contaba con enlaces visuales con la Torre de Guadalmesí y la Torre del Cabo de Gracia. A su alrededor también se levantaron otras fortificaciones como murallas o las baterías y nidos de ametralladoras, de las que quedan algunos restos actualmente.

No fue hasta el siglo XVIII cuando se llevó a cabo una reforma para convertir la torre en faro. Fernando VII, durante su reinado, la dotó de un nuevo torreón y nuevas ópticas, convirtiendo el lugar en un punto de referencia para la navegación por el Estrecho.

Actualmente, el faro sigue funcionando y se encuentra en buen estado de conservación. Alcanza los 43 metros de altura sobre el nivel del mar y 33 sobre el terreno, además, es parte del Patrimonio Histórico Español desde 1985, año en el que entró en vigor la ley que protege al edificio.

La Isla de las Palomas

Es el punto de unión entre el océano Atlántico y el mar Mediterráneo, el último territorio de Europa, o el primero, antes de cruzar el Estrecho para cambiar de continente.

El espigón separa el mar Mediterráneo y el océano Atlántico, dejando a ambos lados la playa de Los Lances y playa Chica.

Desde 2022, la isla de Tarifa cuenta con un Centro de Interpretación que puede visitarse con cita previa. Además, en las instalaciones anexas al faro hay una exposición permanente para recorrer la historia del entorno y conocer los fondos marinos del enclave.