La comarca del Campo de Gibraltar tiene muchas particularidades debido a su situación geográfica y a su orografía. Aunque la parte sobre el nivel del mar es la que mejor conocemos, bajo el agua de estas tierras viven multitud de especies marinas y además puede encontrarse el primer arrecife artificial de Europa. Pero hoy vamos a hablar de las alturas, concretamente de esa nube blanca y esponjosa que a veces tapa la cima del peñón.
Una de las más notables características de la comarca es el viento de levante que da origen al denominado efecto "foehn" en el Peñón de Gibraltar. En la región, este fenómeno meteorológico se conoce como la nube de la Roca, la boina o la montera. El viento fuerte y húmedo del Mediterráneo, al chocar con la forma rocosa de 400 metros de altura, genera una nube estudiada por meteorólogos como un fenómeno genuino de la zona. Además, el Estrecho de Gibraltar tiene una gran influencia en el viento de buena parte de Andalucía, siendo el lugar de origen del levante de toda la costa mediterránea. El efecto "foehn" también se conoce como efecto "foam", anglicismo que significa espuma, debido a la textura espumosa de esta nube que corona la roca.
El fuerte viento en el Estrecho es resultado de las altas y bajas presiones en las Azores y el continente africano. El viento de levante, procedente de África, trae consigo aires húmedos y aguas cálidas, mientras que el viento de poniente ofrece un aire más fresco y aguas frías. Además, estos vientos son los responsables de que Grazalema y su sierra, la más cercana al Campo de Gibraltar, sea la zona con mayor cantidad de precipitaciones de la península, ya que la masa rocosa de este bello pueblo de la sierra gaditana es el primer obstáculo que se encuentran los vientos atlánticos cargados de agua oceánica, y allí descargan toda la lluvia acumulada durante su viaje.
Comentar
0 Comentarios
Más comentarios