Antonia Malia, la primera y única mujer de la Policía Local de Tarifa, se despide tras cuatro décadas de servicio
"Entré con la ilusión de servir a mi pueblo, y hoy me voy con la satisfacción de haber dado lo mejor de mí. Siempre llevaré a Tarifa en el corazón", expresó la agente
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Tarifa/Tarifa despidió este viernes a una mujer que ha hecho historia en la seguridad local. Antonia Malia Jiménez, conocida cariñosamente como 'la zahareña', se ha retirado tras 40 años y seis meses de servicio en la Policía Local, dejando atrás un legado imborrable como la primera y única mujer en la Jefatura durante décadas.
La emotiva despedida se llevó a cabo en las instalaciones de la Jefatura, donde Malia estuvo acompañada por su familia y una segunda familia, la de sus compañeros de uniforme. Entre abrazos, risas y lágrimas, la agente recibió el reconocimiento de sus colegas y superiores, quienes le ofrecieron un ramo de flores en señal de gratitud y admiración.
El alcalde de Tarifa, José Antonio Santos, junto al concejal de Seguridad Ciudadana, Jorge Benítez, presidieron el acto, destacando el valor y la perseverancia de una mujer que abrió camino para futuras generaciones en un entorno profesional tradicionalmente masculino. "Antonia ha sido ejemplo de dedicación y vocación de servicio público desde que se unió al cuerpo a principios de los años 80, formando parte de un reducido grupo de mujeres que apostaron por esta profesión", resaltó Santos durante su intervención.
A lo largo de cuatro décadas, Antonia Malia no solo ha desempeñado sus funciones con profesionalidad, sino que también ha sido testigo de la evolución y modernización de la Policía Local, adaptándose a los cambios y formándose continuamente.
Al finalizar el acto, la agente expresó emocionada su agradecimiento por el cariño recibido y recordó con nostalgia sus primeros días en el servicio. "Entré con la ilusión de servir a mi pueblo, y hoy me voy con la satisfacción de haber dado lo mejor de mí. Siempre llevaré a Tarifa en el corazón".
Ahora, tras décadas de entrega, Antonia Malia afronta una nueva etapa en la que, como ella misma dice, espera dedicarse a "vivir plenamente" rodeada de su familia y amigos, aunque sin perder el contacto con la que siempre considerará su gran familia policial.