En estos tiempos, el ahorro energético y la sostenibilidad se han convertido interés de todos, y es por eso que es importante preguntarnos sobre el consumo de los aparatos eléctricos que usamos diariamente. Un ejemplo claro es el calentador de aire, común en muchos hogares, especialmente durante los meses más fríos.

El consumo del calentador de aire

Para entender cuánto gasta un calentador de aire durante el tiempo que nos damos una ducha, es esencial conocer su funcionamiento en términos de kilovatios hora (kWh). En España, el precio medio del kWh ronda los 0,20 €. Por ejemplo, un calentador de aire de 1500 W, si está encendido durante una hora, consumirá 1,5 kWh, lo que se traduce en un gasto aproximado de 0,30 € por hora.

Para calentadores de distintas potencias, los consumos varían:

• Un calentador de 2000 W consume 2 kWh por hora, costando 0,40 € cada hora.
• Un calentador de 1500 W gasta 1,5 kWh por hora, es decir, 0,30 € por hora.
• Un calentador de 1200 W utiliza 1,2 kWh por hora, lo que representa 0,24 € por hora.
• Un calentador de 400 W consume 0,4 kWh por hora, con un costo de 0,08 € por hora.

La duración (más o menos) de una ducha en España

El tiempo que pasamos en la ducha es otro factor clave. Según una encuesta, 'Hábitos diarios de los españoles en la ducha', realizada por la empresa Hansgrohe, un 42% de los españoles se ducha cada día por más de 10 minutos. Sin embargo, en general, los españoles suelen ducharse una vez al día, por la mañana, durante 6 a 10 minutos.

El gasto durante una ducha

Tomando como referencia un calentador de 1500 W y una ducha de 10 minutos, el gasto energético sería aproximadamente de 0,05 € (0,30 € por hora dividido entre 60 minutos, multiplicado por 10). Este cálculo es algo aproximado y puede variar dependiendo de la potencia del calentador y la duración de la ducha.

Consejos para un uso eficiente

Para optimizar el uso de un calentador de aire y reducir su consumo, ten en cuanta que:

• Usa un temporizador: Programa el calentador para que funcione solo cuando sea necesario.
• Ajusta el termostato: Mantén una temperatura confortable sin excederse, ya que cada grado adicional aumenta el consumo.
• Cierra puertas y ventanas: Evita fugas de calor asegurándote de que el lugar esté bien cerrado.
• Ubicación adecuada: Coloca el calentador en un lugar que permita un mejor aprovechamiento del calor.
• Mantenimiento regular: Un aparato limpio y en buen estado es más eficiente.
• Eficiencia energética: Si vas a comprar un calentador nuevo, opta por uno con mejor clasificación energética.