Crónica negra española
El trágico caso de Hildegart Rodríguez: genio y locura en la España del Siglo XX
Según fuentes del Tribunal Superior de Justicia, el juzgado de Instrucción número 3 de Murcia ha abierto diligencias por la comisión de 13 delitos de homicidio imprudente en el incendio de la discoteca Fonda Milagros y Teatre que tuvo lugar el pasado 1 de octubre de madrugada en Murcia.
La investigación, que se encuentra actualmente bajo secreto de sumario, sigue abierta mientras se está a la espera de que se reciban los resultados de las autopsias de los 13 cuerpos encontrados tras el fuego. Tal y como ya ha avanzando la concejala de Bienestar Social del Ayuntamiento de Murcia, Pilar Torres, “se van a depurar responsabilidades” en lo sucedido.
“Hemos pasado del dolor y del sufrimiento a la indignación”, ha dicho a los medios de comunicación. No ha hecho mención, sin embargo, sobre por qué no estaban cerrados los locales a pesar de la orden de cierre que tenían desde octubre de 2022, lo que significa que no tenían licencia para seguir funcionando.
A preguntas de si el Ayuntamiento está dispuesto a asumir toda la responsabilidad, Torres ha afirmado que van “a llegar hasta donde haga falta; le duela a quien le duela y tenga las consecuencias que tenga, por supuesto”.
Desde la oposición ya han advertido de que recurrirán “a todas las vías a su alcance para que se haga justicia a las víctimas de una catástrofe que nunca debería haber sucedido”.
El juzgado, además de los cuatro equipos médicos forenses destinados en los Institutos de Medicina Legal, cuenta para la obtención de estos resultados de las autopsias con la asistencia del Instituto Nacional de Toxicología Ciencias Forenses y la Comisaría General de Policía Científica.
Esta labor comprende, además del examen externo, un estudio radiológico, con el fin de obtener datos identificativos, tales como malformaciones congénitas y o cualquier hallazgo que contribuya a establecer la causa de la muerte, y examen interno, si fuera necesario. En este caso también se tomaron muestras de sangre para determinar la posible existencia de tóxicos, como la carboxihemoglobina (un compuesto tóxico resultante de la unión de la hemoglobina con el monóxido de carbono) que impide el aporte de oxígeno a la célula.
Las muestras para la obtención de perfiles genéticos (ADN) fueron remitidas al Laboratorio de la Comisaría General este lunes, 2 de octubre, por la tarde por los miembros de la Policía Científica, junto a las recogidas de familiares y allegados, para su identificación. Labor para la que cuentan, si fuera necesario, con la asistencia del Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses.
También te puede interesar
Crónica negra española
El trágico caso de Hildegart Rodríguez: genio y locura en la España del Siglo XX
Lo último
La Guardia Civil en San Roque (CCXLV)
La reorganización de la Guardia Civil (XXIX)
Instituto de Estudios Campogibraltareños
Una descripción inédita de Gibraltar de Pedro Cubero Sebastián (I)