Semana Santa

El Yacente desafía a la lluvia para reencontrarse con la fe de la calle

  • La cofradía del Santo Entierro desfila con un itinerario de apenas dos horas por la amenaza climatológica Aunque de forma breve, vuelve a regresar a las calles tras dos años de ausencia

Tras dos años de lágrimas el Viernes Santo recuperó una leve sonrisa. La cofradía del Santo Entierro y María Santísima de la Soledad salió en procesión pasadas las nueve de la noche, según lo previsto. A las 21:16 horas ya estaba el Cristo Yacente frente a la iglesia de la Palma, su sede, para encandilar el paso aunque acortado mirando al cielo, que prometía un manto de lluvia. El recorrido se tornó hacia la calle Alfonso XI para regresar por Regino Martínez.

La sensación de humedad, la imperturbable sensación de viento, simplemente la amenaza del cielo, lastraban la salida del paso. A las 21:29 horas se produjo la primera levantá junto al templo. El suave balanceo de los cargadores acompañaba el desfile ante cientos de personas que quisieron ver al Yacente en procesión, después de dos años de ausencia en las calles. Eran las nueve y media pasadas cuando la fuerza del agua se atestiguó dejando un mar de lágrimas que caían sobre el Cristo.

Cuando parecía que la lluvia daba una tregua los paraguas aparecieron por toda la plaza y una saeta empezó a sonar desde un balcón de la calle Alfonso XI. Los aplausos rompieron a la par con la salida del templo de La Soledad, que llenaba de esperanza y devoción a los cofrades.

Tras un breve recorrido por las dos calles principales de Algeciras el Yacente y La Soledad se encontraron en la puerta de la iglesia sobre las 22:50 horas, las velas ya apagadas testimoniaban la dureza de una noche con tregua. El himno de España empezó a sentirse con la entrada del Cristo y la Virgen, bajo el repunte de la lluvia volvió a su templo para yacer allí y ser velada por sus fieles y los hermanos de la cofradía del Santo Entierro. Un breve paseo pero que les hizo reencontrarse con la fe de la gente de la tierra. Antes de la once de la noche el Viernes Santo dijo adiós a la ciudad con la recogida de el último paso en procesión.

El acompañamiento musical lo condujo con el Cristo un tambor y para el Palio la agrupación Amando Herrero de Algeciras. La comitiva oficial estuvo formada por el alcalde, José Ignacio Landaluce, y concejales de la Corporación Municipal.

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