La calle San Felipe de San Roque se bañó en un caudal de fervor al paso de las 14 hermandades y cofradías sanroqueñas, que se unieron en la ya tradicional y esperada Procesión Magna del Santo Entierro del Viernes Santo. El casco histórico de la localidad tricentenaria despertó a primera hora de la tarde entre el olor a incienso que envolvía la plaza de la Iglesia en cada salida que las hermandades iban realizando de la parroquia Santa María Coronada.

La estampa volvió a repetirse un año más, con un sol que se alió con los sanroqueños, para poder recrear la Pasión de Cristo según San Roque. Cada paso fue tomando cobijo en el templo desde el Domingo de Ramos para poder tomar las calles de la mano en el Viernes Santo bajando por San Felipe hasta alcanzar la plaza de Andalucía, Terrero Monesterio, General Lacy, Colón, Los Reyes, San José, San Nicolás, Rubín de Celis y, de nuevo, a la parroquia.

El escuadrón de romanos a caballo marcó el camino a las hermandades y cofradías iniciando su descenso por San Felipe, que salieron con una cadencia de 15 minutos desde la primera salida en todos los puntos de paso.La estrechez de la calle fue uno de los principales atractivos de esta procesión, declarada de Interés Turístico Nacional de Andalucía, que flanqueaba el transcurrir de los pasos entre balcones engalanados y pétalos lanzados al cielo para que acariciaran las imágenes sanroqueñas.

La Procesión Magna saca a las calles algunas imágenes de gran antigüedad que ya se veneraban en Gibraltar antes de la caída del Peñón y del traslado de sus habitantes a lo que ahora es San Roque. La Procesión Magna es una de las más destacables muestras de fervor de la provincia siendo punto de encuentro para muchos sanroqueños que viven fuera de la ciudad.

El Viernes Santo es uno de los días más grandes de la ciudad sanroqueña, que se convierte más que nunca en el corazón comarcal de la Semana Santa, ofreciendo una procesión solemne y rigurosa en la que la recreación de la Pasión se hace protagonista.

En la Magna participaron las hermandades de la Oración en el Huerto y el Mayor Dolor; Jesús Cautivo y Rescatado Medinaceli y Nuestra Señora de la Merced; el Cristo de la Humildad y Paciencia y la Esperanza; el Nazareno y María Santísima de los Dolores; la Buena Muerte y la Amargura; el Cristo de la Vera Cruz en el Calvario; las Angustias y el Santo Entierro y Nuestra Señora de la Soledad.