Cepsa invertirá 3.000 millones de euros en las instalaciones industriales de San Roque y Huelva para la construcción de sendas plantas de producción de hidrógeno verde con las que la compañía desarrollará desde Andalucía la principal vertiente de su transición energética hasta el año 2030.  

El consejero delegado de Cepsa, Maarten Wetselaar, ha presentado este jueves las líneas maestras del Valle andaluz del hidrógeno verde en un acto con el respaldo del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, y la vicepresidenta tercera del Gobierno, Teresa Ribera, entre otras autoridades.

El proyecto de la compañía energética se articulará a través de dos plantas de electrólisis para generar hidrógeno verde y sus derivados energéticos, como el metanol o el amoníaco, que se ubicarán en San Roque y Huelva. Cada una tendrá 1 GW de potencia y permitirán producir en conjunto hasta 300.000 toneladas al año. Cepsa ha desatacado que son las mayores instalaciones de su clase en Europa anunciadas hasta el momento.  

La unidad de hidrógeno verde de San Roque se instalará en el interior del recinto del parque energético con una previsión de puesta en marcha para el año 2027. Las instalaciones de Huelva, en cambio, se construirán en las proximidades del actual recinto de la compañía en Palos de la Frontera con miras a su entrada en operaciones en 2026 y máximo rendimiento programado para 2028. Cepsa ya trabaja en la ingeniería y la tramitación administrativa. 

Para suministrar la electricidad que necesitarán las dos instalaciones, Cepsa desplegará otros 2.000 millones de euros más en inversiones con los que promoverá varios parques de energías renovables (eólica y fotovoltaica) en Andalucía con un total de 3 GW. De esta forma, se alcanzarán los 5.000 millones de euros de inversión en la región anunciados por Cepsa el pasado mes de mayo, cuando el propio consejero delegado presentó en Madrid la estrategia de transición energética Positive Motion. Es la mayor inversión anunciada por la compañía en Andalucía hasta la fecha. 

"El hidrógeno verde es la demostración clara de que nuestra estrategia de transición energética toma velocidad de crucero. Es un momento histórico y tenemos que estar a la altura para buscar soluciones sostenibles y eficaces", ha subrayado Wetselaar en su intervención ante un pleno prácticamente absoluto de autoridades del Campo de Gibraltar, Huelva y de las administraciones regional y estatal. 

El consejero delegado de Cepsa, Maarten Wetselaar.

"El momento exige acelerar, no frenar. España tiene una oportunidad histórica de cambio industrial para ser un referente como país en la lucha contra el cambio climático, para ofrecer energía barata y accesible e incluso tener capacidad de exportación hacia puertos como el de Róterdam", ha abundado el consejero delegado de Cepsa.  

El máximo responsable de la compañía ha demandado a las autoridades un trabajo coordinado entre el Gobierno central y la Junta de Andalucía, así como un marco jurídico claro, ayudas económicas e incentivos además de agilidad en la tramitación burocrática y la obtención de permisos. 

En total, Cepsa invertirá 8.000 millones de euros en España hasta 2030 para, además del hidrógeno, promover la fabricación de combustibles más sostenibles y con menor huella de carbono.  

Pedro Sánchez y Juanma Moreno han coincidido en saludar la apuesta estratégica de Cepsa por Andalucía y la necesidad de descarbonizar la industria para, a su vez, alcanzar una independencia energética que permita incluso a España convertirse en una nación exportadora en un futuro a medio plazo.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, durante su intervención ante las autoridades.

De hecho, Cepsa pretende llevar parte del hidrógeno verde que produzca en San Roque y Huelva hasta el puerto de Róterdam, el mayor puerto energético de Europa.

Los planes de la compañía, así mismo, cuentan con el apoyo del Ayuntamiento de San Roque. El alcalde, Juan Carlos Ruiz Boix, ha comprometido su cooperación en la tramitación de los proyectos por ser sostenibles desde el punto de vista del medio ambiente, la salud y la ordenación territorial. 

Cepsa estima una generación de 10.000 puestos de trabajo, entre empleos directos, indirectos e inducidos, durante la construcción y vida útil de estas dos plantas de hidrógeno verde. De ellos, 1.000 serán empleos directos y también se requerirá del aporte de más de 400 pymes y autónomos que, a su vez, se beneficiarán del efecto tractor de Cepsa. 

Un corredor de hidrógeno verde hasta Róterdam

Gracias a la ejecución de las dos plantas de hidrógeno verde en Andalucía, Cepsa y el puerto de Róterdam (el principal de los Países Bajos) podrán establecer el primer corredor de hidrógeno verde entre el sur y el norte de Europa. Su puesta en marcha está prevista para el año 2027 y posee igualmente el aval de representantes del país, dado que a la presentación de este jueves también ha acudido el embajador de Holanda en España, Jan Versteeg, y una delegación del puerto holandés. 

Cepsa prevé exportar el hidrógeno verde a través de productos energéticos derivados como el amoniaco o el metanol, hasta Róterdam a través de buques que zarparán desde el Puerto de Algeciras. Con este proyecto, sus promotores buscan asegurar una cadena de suministro entre dos de los principales centros logísticos marítimos del continente. 

El holandés es el puerto energético más importante de Europa, ya que gestiona el 13% de la demanda energética europea, mientras que el de Algeciras es el primer puerto de España y el cuarto de Europa en movimiento de mercancías y un centro estratégico en la ruta comercial entre Europa y Asia. Además, entre sus objetivos estratégicos se encuentra afianzar su posición como hub energético en el Estrecho de Gibraltar. 

Las instalaciones de Cepsa en Andalucía cuentan con una ubicación favorable y muy competitiva para desarrollar el negocio de producción de hidrógeno y su exportación hacia Europa.

Biocombustibles

Paralelamente, Cepsa aspira a liderar la producción de biocombustibles de segunda generación, con una producción de 2,5 millones de toneladas al año en 2030, fomentando así la economía circular y la descarbonización de sus instalaciones. Estos productos también se elaborarán en los centros industriales de Andalucía, que ya se están transformando en biorrefinerías y en las que instalará nuevas unidades para procesar estos productos que permiten descarbonizar el transporte aéreo, marítimo y terrestre.

Asimismo, la compañía implementará en sus parques energéticos andaluces tecnologías basadas en la inteligencia artificial y analítica avanzada para optimizar sus procesos y reducir el impacto ambiental de la actividad de sus centros industriales.