La magia del ballet llena el teatro Florida con 'El lago de los cisnes'

El teatro Florida de Algeciras presenció ayer un nuevo lleno absoluto de público para disfrutar de un espectáculo muy especial, El lago de los cisnes, a cargo del Ballet Imperial Ruso, bajo la dirección artística de Gediminas Taranda. La respuesta fue especialmente destacada entre el público más maduro, al ser una cita cultural diferente a las que ocupan la agenda local. Diferentes escenografías y un ritmo incesante de detalles y movimientos, coreografías con un equilibro milimetrado, que arrojaban aplausos ante un patio de butacas vibrante y emocionado.

La música de Piotr Chaikovsky marcó el ritmo vertiginoso y suave de un punzante modo de danzar que impedía desviar la mirada del escenario algecireño. Sin palabras, salvo la melodía que se traducía en sentimientos que impregnaban los artistas sobre el escenario. Los principales nombres fueron María Filipova y Radamaria Duminica, en el papel de Odette-Odile; Mark Izyrov como el príncipe Sigfrido; Filip Parkhachev, como el Brujo Rothbart; y Ekaterina Loseva encarnando a la reina.

El espectáculo arrancó con un escenario que simulaba ser el jardín del castillo, lugar en el que el príncipe celebra su 21 cumpleaños. El Florida también acogió el mítico lago donde descubre a Odette, convertida en cisne, que le explica que el sortilegio no podrá romperlo más que aquel que le jure amor eterno. Las coreografías, a cargo de Lev Ivanov y Maruis Pelita, recrean con majestuosidad la obra.

El ballet Imperial Ruso fue creado en 1994, por iniciativa de Maya Plisetskaya, que fue su presidenta de honor y asesora general hasta 2004. Durante ese tiempo la famosa bailarina, Premio Príncipe de Asturias, actuaba en este ballet. A su vez, el director artístico del ballet es uno de los más famosos bailarines de Rusia.