José Tomás aterriza en el aeropuerto de Gibraltar y se recupera en su casa de Estepona

El matador de toros José Tomás llegó ayer a España y se recupera en su domicilio de Estepona. El diestro de Galapagar aterrizó por la tarde en el aeropuerto de Gibraltar en un avión privado desde la ciudad mexicana de Aguascalientes acompañado de sus padres y su novia, según confirmó a este diario su apoderado Salvador Boix.

El objetivo del torero es comenzar su recuperación en su casa esteponera y comenzar la rehabilitación, que consistirá, de momento, en leves paseos por la playa con pequeños baños en el mar para que la herida cicatrice cuanto antes, tal y como ha hecho en percances anteriores.

En esta ciudad malagueña estará acompañado, además de su novia, por su hermano Antonio, futbolista de la unión Estepona y fisioterapeuta de profesión y con quien comenzará el proceso de rehabilitación.

A pesar de la rapidez con la que el torero se está recuperando, el diestro no ha dado fecha para su reaparición. Hasta el momento va a perder las corridas de Jerez, mañana sábado, donde será sustituido por Morante de la Puebla, la corrida aniversario de Bilbao y la de la Feria de Córdoba el miércoles 26 de mayo.

Aunque es pronto, la posible reaparición podría ser en la plaza de toros de Granada el 6 de junio con un cartel en el que están anunciados junto al de Galapagar Julio Aparicio y el francés Juan Bautista. Se da la circunstancia que en esta feria reapareció después de la grave cornada que sufrió en el coso mexicano de Autlán de la Grana en 1996. Aquel 18 de febrero de 1996, el de Galapagar perdió también muchísima sangre sufriendo hasta dos paros cardiacos en la camilla de la enfermería. También fue necesario, en aquellos dramáticos momentos, transfundir sangre al torero y uno de los donantes fue su entonces apoderado el diestro granadino Santiago López.

El diestro madrileño recibió una cornada la madrugada del domingo 24 de abril de unos 15 centímetros en el tercio medio del muslo izquierdo con una trayectoria hacia arriba y hacia atrás que le afectó a las venas femorales superficiales y profunda y la ilíaca. Los médicos calcularon que perdió unos seis litros de sangre y recibió varias transfusiones hasta llegar a ocho litros de sangre.

La cogida ocurrió durante la lidia del quinto toro, de la ganadería de Pepe Garfías, El toro le había avisado aunque el torero, fiel a su estilo, insistió en su faena hasta que resultó cogido.