La estructura del peaje de la AP-4 ha comenzado a ser desmantelada este viernes. Los operarios se afanaban desde primera hora en eliminar cualquier rastro de los puestos y garitas que han permanecido en pie durante 48 años para cobrar el tramo de 86 kilómetros que separan Cádiz de Sevilla.

Desde la tarde del 31 de diciembre de 2019, fecha en la que se produjo la tan ansiada liberalización de la AP-4, la estructura permanecía en pie aunque sin ninguna función. Eso sí, obligaba a los conductores a reducir considerablemente la velocidad en Las Cabezas para atravesar el peaje por alguno de los carriles de cobro.

Con la eliminación de esta tasa, los usuarios se ahorrarán sesenta y dos millones de euros. La autovía más amortizada de Europa, se ha visto libre del pago tras 48 largos años y diversas prórrogas, ya que las barreras de la autopista Cádiz-Sevilla debieron levantarse en 1993.