"Somos 600 padres de familias que dependemos de esto para subsistir"

José Antonio Rossi García es uno de los trabajadores que vive con inquietud la situación en las almadrabas. La que acaba de empezar será su decimoctava temporada faenando, desde que su padre se jubiló y, como era tradición, le cedió su puesto en esa cofradía milenaria que venera al atún, el rey del Estrecho. Ayer, a las puertas del Ayuntamiento de Barbate, nos contaba que con su mujer en paro y dos hijas de 14 y 8 años su situación es delicada. "Trabajo seis meses en la almadraba, y el resto del tiempo intento dedicarme a mi oficio real, que es el de mecánico naval, aquí o en el extranjero. Pero la decisión del Gobierno de quitarnos el observatorio científico puede ser terrible si no llegamos a acumular los meses de trabajo necesarios para cobrar el paro. Hay muchas familias que lo van a pasar muy mal en una zona tan deprimida como esta".

José Antonio es natural de Barbate, aunque pertenece a la almadraba de Conil, de la que es presidente del comité de empresa. Ayer presenció la reactivación de la Plataforma en Defensa de las Almadrabas que se fundó en 2008 y que permitió la creación del citado observatorio y del fondo de maniobra. "Hay 600 padres de familias pendientes de un hilo", nos decía apesadumbrado, para terminar asegurando que no creía las palabras tranquilizadoras salidas desde el Ministerio, "porque las palabras se las lleva el viento, quiero acuerdos firmados".