La Autoridad Portuaria de la Bahía Algeciras (APBA), asociaciones empresariales de la comunidad portuaria, sindicatos e instituciones del sector han completado el registro de alegaciones en Bruselas al denominado Emissions Trading System (ETS).

Se trata de una propuesta de modificación de la Directiva actual de la Comisión Europea, integrada en el denominado Pacto Verde Europeo (Green Deal), que plantea medidas para el transporte marítimo con el objetivo de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 55% en 2030. Una meta que comparte todo el sector.

Pero tal y como está planteada en la propuesta inicial del ETS, la inclusión del transporte marítimo tendrá un "previsible impacto negativo" en los transbordos de los puertos del Sur de la Unión Europea, según el Puerto de Algeciras. Existe riesgo de deslocalización de las escalas de transbordo en Algeciras en favor de puertos como Tánger-Med, situado con mínima desviación en el Estrecho de Gibraltar pero fuera de la UE y totalmente al margen de su normativa. 

En este sistema se incluye un futuro método de control de emisiones de CO2 que la Comisión Europea pretende aplicar de forma gradual, en principio, entre 2023 y 2026 a los buques con más de 5.000 toneladas de arqueo bruto con cupos de derechos de emisión y pago por excedentes de toneladas emitidas por parte de las navieras, tal y como adelantó Europa Sur en agosto del pasado año.

El presidente de la APBA, Gerardo Landaluce, ha advertido de este riesgo: “Esto es debido a que se produciría una fuga de escalas a puertos cercanos no europeos para disminuir el pago de los derechos de emisión”. Landaluce reclama que si realmente se busca reducir las emisiones globales “todos debemos tener las mismas reglas de juego”. Para el Puerto de Algeciras, la propuesta está concebida de manera que “las emisiones no se reducirán mientras el daño económico a los puertos con actividad de transbordo en el Sur de Europa será irreversible”.

La batería de alegaciones del sector persigue que durante la tramitación en el Parlamento y el Consejo Europeo se establezcan fórmulas que eviten la distorsión de la libre competencia con terceros países vecinos y la iniciativa proteja la cadena logística europea. Se han presentado más de un centenar de alegaciones, la mayoría desde Bélgica, Alemania y España.

Durante el pasado verano, la APBA y las asociaciones empresariales del Puerto de Algeciras, mantuvieron un encuentro con la secretaria general de la Organización de Puertos Europeos (ESPO), Isabelle Ryckbost, a la que trasladaron la preocupación existente.

Tanto desde el Puerto de Algeciras como desde ESPO quedó clara la comunión con los objetivos climáticos del Green Deal, pero también los devastadores efectos económicos que la aplicación de la propuesta inicial tendría a este lado del Estrecho. Desde entonces, a través de reuniones y jornadas, la APBA ha llevado a cabo una incesante actividad de sensibilización del sector.

A su vez, el Puerto de Algeciras se ha adherido recientemente a la iniciativa Call to Action que ya busca la total descarbonización del transporte marítimo para 2050.

Coordinadora también alega

El sindicato Coordinadora Estatal de Trabajadores del Mar se encuentra entre las entidades que han registrado alegaciones a la propuesta de Reglamento por considerar que existe posible merma de competitividad de los puertos españoles frente a puertos del entorno que no forman parte de la UE. También ven posible pérdida de influencia internacional de los mismos al perder trasbordos, así como impacto negativo en el empleo y en la economía del país.

La central sindical cita como puertos que se beneficiarían de este factor de competencia a los marroquíes de Tánger-Med y Casablanca en Marruecos. Pero también a los muelles de Felixstowe, Southampton, Londres y Liverpool, en Reino Unido; Ambarli y Mersin en Turquía; Ashdood y Haifa, en Israel; Beirut, en Líbano; Port Said y Damietta en Egipto y Odessa, en Ucrania. 

Coordinadora reconoce y valora positivamente el papel del Pacto Verde como iniciativa de transformación económica y social, aunque ve resquicios negativos para el transporte marítimo internacional. "Supondría la destrucción de miles de puestos de trabajo y una mayor dependencia exterior de la Unión Europea", advierte la central que encabeza Antolín Goya. 

En el escrito de alegaciones, Coordinadora apunta que el sistema portuario español ocupa el noveno puesto en conectividad mundial del transporte marítimo y el tercero a nivel europeo, según la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Comercio y Desarrollo. Asimismo, se destaca que el volumen de mercancías manipulado en trasbordo en los puertos españoles de Algeciras, Valencia, Barcelona y Las Palmas, al estar conectados con las principales rutas mundiales de comercio marítimo, acumulan entre los cuatro más de nueve millones de contenedores de trasbordo en 2019 y 2020.

Los cambios propuestos "situarían la actividad de trasbordo de puertos españoles en clara desventaja frente a los puertos extracomunitarios cercanos, pues esta reglamentación afecta plenamente a todo el tráfico marítimo dentro del Espacio Económico Europeo (EEE) y al 50% de las emisiones en los viajes del EEE a los puertos de fuera de este Espacio".

Para Coordinadora, los principales puertos españoles compiten con puertos cercanos no pertenecientes al ámbito de la comunidad europea de forma que un aumento del coste de las escalas de trasbordo en los puertos españoles supondría "una importante pérdida de tráfico por línea y la pérdida de inversiones privadas en los puertos" con la consiguiente merma de puestos de trabajo en los diferentes subsectores que forman la actividad portuaria y la obsolescencia del sistema portuario.