El paseo marítimo de Santa Bárbara, en pésimas condiciones

El paseo marítimo de Santa Bárbara de La Línea, sobre todo en el tramo final que colinda con Gibraltar, presenta un estado bastante deficiente apenas dos meses después de la recepción por parte del Ayuntamiento de las obras de remodelación ejecutadas por Demarcación de Costas.

A este respecto, hay que recordar que este organismo, que depende del Ministerio de Medio Ambiente, invirtió 2,9 millones de euros para llevar a cabo los trabajos, que fueron adjudicados a Aldesa Construcciones y por los que la playa permaneció un total de 18 meses cerrada a su utilización por linenses y visitantes.

Losetas levantadas, arquetas partidas, plafones fundidos, cubos llenos de basura y excrementos y suciedad de todo tipo esparcidos por la arena conforman la imagen actual del paseo. Una dejadez y falta de higiene que se ven agravadas con la presencia en la zona de un parque infantil frecuentado por niños.

Los lavapiés no están operativos para los bañistas y sus tuberías sobresalen un metro de la arena en dirección vertical. Además, en esta parte del litoral desemboca un colector, también con gruesas tuberías a la vista, que está vertiendo en la playa aguas sucias.

Este último hecho fue denunciado recientemente por el Partido Andalucista (PA) que encabeza Ángel Villar como secretario local, quien resaltó que estas tuberías no se veían antes de llevarse a cabo la rehabilitación de esta parte del litoral linense y preguntó al Ayuntamiento si por parte de Demarcación de Costas se iba a solucionar el problema que esto suponía para los ciudadanos.

Este diario se trasladó ayer al paseo para departir con algunos usuarios, que no son ajenos a las actuales condiciones que presenta el enclave. "Parece mentira el estado que presenta el paseo de Santa Bárbara, una zona que se presupone turística y que debiera estar en perfecto estado", comentaba un viandante mientras su compañera resaltaba con indignación que, "para los impuestos que se pagan, la zona debería estar por lo menos aceptable, pero ni eso".

El proyecto de remodelación del paseo de Santa Bárbara no ha estado exento de problemas desde que se iniciaron las obras, que obligaron, como es lógico, a a clausurar uno de los tramos del litoral linense más concurridos junto a las playas de Levante y Poniente.

Así, el diseño del proyecto, ejecutado por la empresa Aldesa Construcciones, fue muy criticado en su momento por Unidad por La Línea (UPL), que insistió en numerosas ocasiones en los errores que debían ser subsanados, como la altura de la obra, que favorece la invasión de arena, o la pérdida de aparcamientos que había ocasionado el acondicionamiento de este espacio.

Actualmente, este medio ha podido comprobar cómo algunas de las rampas de acceso a minusválidos están completamente repletas de arena. UPL pidió al alcalde, Juan Carlos Juárez, que no aceptara la recepción de las obras hasta que estos problemas no fueran solucionados.

Por su parte, el concejal de Urbanismo en el Ayuntamiento de La Línea, Manuel Aguilera, explicó ayer a Europa Sur que en su momento se remitió un escrito a Demarcación de Costas para que ésta contactara con la empresa contratista Aldesa Construcciones y, de este modo, poner en su conocimiento la necesidad de reparar las deficiencias que presenta este tramo de Santa Bárbara. "Las obras tienen un año de garantía y tienen que arreglar las carencias. No es normal que tan sólo un mes y medio después de la inauguración de estas obras, aquello esté como está", indicó Aguilera, quien no obstante no se pronunció sobre la acumulación de basura en el lugar, cuya recogida sí es competencia de la Administración local.

El día de su inauguración el pasado 16 de junio, el ingeniero director del proyecto, Gregorio Gómez, señaló que con estos trabajos la playa había ganado 14 metros de ancho y que se había conseguido la recuperación de 11.000 metros cuadrados de playa.

A colación explicó que, además, con la remodelación se había reservado un camino de servicios para la entrada de vehículos de salvamento, se había construido un parque infantil y se había mejorado la accesibilidad, así como que la zona ahora contaba con un paso peatonal ininterrumpido por todo el litoral de Levante.

Europa Sur intentó contactar ayer con Demarcación de Costas, pero este organismo no pudo responder a las preguntas planteadas al no estar disponibles los técnicos responsables de las obras.

Dejando a un lado el estado de este paseo, a Demarcación de Costas sólo le resta ejecutar otro tramo de paseo marítimo en La Línea, que entraña sin embargo cierta complejidad pues afecta a la zona del Tonelero, donde todavía residen familias.

Hace sólo unos meses, el alcalde, Juan Carlos Juárez, expresó su deseo de que este otro paseo se ejecute, y anunció su intención de buscar una reubicación a las familias cuyas viviendas tendrán que ser derrumbadas por las obras.

2,9