La Enciclopedia de La Línea recoge en el tomo III las biografías de 329 personajes linenses o muy vinculados a la ciudad. Están representados casi todos los estamentos y profesionales. Contiene historias de literatos, pintores, docentes, sacerdotes, médicos, cantaores, cantantes, bailaores, compositores, músicos y toreros, además de psicológicos, locutores, deportistas y actores.

Marisma y Arena (Grupo musical rociero)

Este grupo rociero nace en mayo de 1987. Hacen su debut en el pub Roma de Los Barrios. Lo forman: Kiki y Cumbia a la guitarra, Gustavo a la percusión rociera y Josele como voz. Un mes después se incorpora Cobián y aquel primer verano cantan en la caseta de la peña Joselito-Manolete y en la elección de reina de la peña El Cerrojo, en la discoteca Dallas.

En 1988 se rehace el grupo con la incorporación de Luis Miguel Delgado y Francis Mañasco. Las actuaciones comienzan a ser más frecuentes y poco a poco logran ir aumentándolas, sobre todo porque era una época en la que no proliferaban los grupos rocieros en la zona. De aquel año, se recuerda las actuaciones en la caseta del Club Náutico y en el pub rociero Triana, en la calle Sol. En este año de 1988 cambian el nombre por el de Rocinas, para que no se les vinculara con el nombre de 1987, pero se dan cuenta de que Marisma y Arena había calado más de lo que pensaron y vuelven a su nombre original.

En febrero de 1989, fueron contratados por primera vez para ir a Londres a la fiesta de la Peña Nuestra Andalucía. Un problema laboral impide viajar a Josele y recurren a Emilio Mena, para que lo sustituya. Lo hace bien y se mantiene en el conjunto aquel mismo año.

La inesperada difusión del grupo les hace plantearse nuevas metas. Las actuaciones son constantes y deciden pensar en su primer disco. Había dinero y recurren a los mejores compositores del momento, para encargarles sus canciones. Así, Rafa Serna les hace Madre me quiero ir, por la que les cobró 15.000 pesetas de la época. Los recibe en su casa de soltero y les canta la sevillana para grabársela en un rudimentario cassette y empezar a ensayarla. Era aquella de “Prepárame la ropa madre…”.

Continúan pidiendo sevillanas, algunas de las cuales tardaban en llegar. Por ello, las dos primeras que reciben las tuvieron que grabar para ir ganando tiempo. Rafa Serna les sugiere un arreglista de Alcalá de Guadaira que estaba empezando y con él graban. Era José Miguel Álvarez, ahora director de la orquesta del programa de Canal Sur Se llama copla.

Graban dos sevillanas en los estudios de Alta Frecuencia en Jerez bajo el control de Pepe Almadana como técnico. Esas dos sevillanas empezaron a sonar en las emisoras y se hicieron conocidas. Una era la ya conocida de Madre me quiero ir y la otra estaba dedicada a la Hermandad del Rocio de La Línea.

Aquel año de 1989 fue el más fructífero con diferencia en la historia del grupo. Los contratos eran semanales y salían de una feria para irse a otra. En junio estuvieron toda la semana en la feria de Algeciras, entre Los Juncales y Los Curiales y el último domingo marchan para Madrid a la sala rociera Al Andalus, donde estuvieron una semana. Vuelven a la feria de La Línea sin días libres. En agosto, toda la semana en la feria de Málaga, en la caseta El Cortijo.

El 1990 fue también un gran año. Londres por segunda vez, ferias de Marbella, Puenta Mayorga, Los Barrios, Campamento, Algeciras, La Línea; viajes a Murcia y Tetuán, programas de televisión en Coria…

El disco salió en 1990. Colaboran el Coro de Coria y el de Jerez. Al mismo tiempo, encargan temas a Feli Perejón, compositor de María del Monte, y a Aurelio Puig, del Coro de Coria. El primero les hace ir a Benacazón a recoger los temas y les cobra 80.000 pesetas por tres sevillanas.

En la caseta El Cortijo dan el espaldarazo al disco, pues cantan también Los Romeros de la Puebla y le indican a José Manuel Moya que le han mandado las letras de dos canciones para que les ponga música. Les responde que ya están terminadas. Fueron a La Puebla y escucharon las canciones. Quedan impresionados con las dos sevillanas: Mi vida es como una carta y Yo pienso en ti a todas horas.

Santiago Manciño (Torero)

Santiago Manciño.

Su verdadero nombre es Ismael Pedro Santiago Belmonte, pero en el mundo de los toros se le conoce por Santiago Manciño, después de adoptar el apellido Manciño de su abuelo.

Nació en La Línea el 22 de octubre de 1979.

Hace su presentación como becerrista en su ciudad natal el 19 de julio de 1995, en plena Velada y Fiestas de La Línea. Actúa con Curro Duarte, José María Campoy, Jesús de Frutos, David Norto y José Luis Toledo. Los becerros son de la ganadería de Ranco Nuevo y se viste para la ocasión con traje de luces de rosa y oro.

Debuta con picadores, también en la Feria de La Línea, el día 20 de julio de 2000, con Curro Duarte Alejandro Amaya, con novillos de la ganadería de Ángel y Juan Antonio Sampedro. Cortó una oreja a su segundo novillo y llevaba un vestido de azul oscuro y oro.

La presentación como novillero la realiza en la Plaza de Toros de Las Ventas, de Madrid, el día 1 de septiembre de 2002, formando cartel con Manolo Martínez y Luis Rubias, con reses de la ganadería de Román Sorando y su primer novillo llevaba de nombre “Bailaor”, colorado, de 520 Kg. de peso. El resultado artístico fue de silencio e iba de rosa palo y oro.

Toma la alternativa en La Línea, el día 18 de julio de 2003. Su padrino fue Jesulín de Ubrique y como testigo, El Fandi, con reses de la ganadería de Gavira. El toro de su alternativa se llamaba “Habanito”, era castaño y portabba el número 14. Iba vestido de azul y oro y cortó una oreja al segundo de su lote.