Benetton cerrará sus puertas en la calle Real tras 22 años en La Línea
El propietario justifica que sin descuentos la gente no compra Es la única tienda de la marca que queda en el Campo de Gibraltar
La tienda de Benetton en La Línea cerrará sus puertas en un mes aproximadamente. El cartel de liquidación total en el escaparate hizo saltar las alarmas y los ciudadanos respondieron de forma positiva al efecto llamada. De hecho, las colas para pagar fueron la tónica todo el día.
La tienda de Benetton abrió sus puertas en la calle Real de La Línea hace 22 años. Anteriormente estaba situada en un local más pequeño pero en la misma calle Real, a escasos metros. Después la apuesta fue por una tienda más grande y en este sitio lleva unos años. Además la antigua propietaria de la tienda durante 12 años se la vendió a su hermano, que es el actual propietario y el que se ha visto obligado a tomar esta importante decisión.
Se trata además de la única tienda de la marca que queda en el Campo de Gibraltar. Por ello, los clientes tendrán que marcharse al centro comercial de Marbella si quieren seguir comprando sus productos. La razón del cierre es bien clara: "La gente no compra si no hay promociones y las rebajas duran todo el año", advirtió el dueño. Las empleadas que trabajan en la tienda se verán igualmente perjudicadas.
La Línea cuenta según las últimas cifras difundidas por el Ministerio de Empleo y Seguridad Social con 10.193 parados en el mes de agosto. A este hecho hay que sumarle las nóminas que se adeudan a la plantilla municipal y el recrudecimiento del conflicto con Gibraltar con el aumento de las colas. Nada de esto hace presagiar un buen horizonte para el comercio linense.
Las clientes de esta tienda que cerrará en octubre preguntaron directamente a las dependientas si van a sacar la ropa de invierno y éstas explicaron que sí, pero una vez que vendan todo lo de la temporada de verano. Los stands ayer ya estaban medio vacíos e incluso de muchos artículos no quedaban tallas. Además las madres y abuelas que guardaron cola llamaron a familiares y amigos para advertirles del cierre y de que se aligeraran.
Aunque a finales de agosto siempre se descolgaron los carteles de rebajas, los tiempos han cambiado y muchas tiendas en La Línea tienen a bien alargar este periodo para no quedarse con stock y así no vender el año que viene lo que es de esta temporada. Los ciudadanos quieren los productos más baratos pero no de manera puntual, sino siempre. Por eso el efecto y el impacto de las rebajas ha quedado muy diluido. La crisis ha tenido un gran impacto a la hora de cambiar la mentalidad de los consumidores. La clientela de Benetton La Línea procedía de toda la comarca. Pero ni eso ha propiciado su mantenimiento.
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