El Ayuntamiento paga a Sermasa y Pau y sus empleados vuelven al trabajo

Los trabajadores de las empresas Sermasa y Pau, concesionarias de los servicios de limpieza, portería y mantenimiento en los colegios públicos, protestaron ayer a las puertas del Ayuntamiento por el impago de sus nóminas, una situación que ya padecieron el mes pasado.

La intención de los empleados era mantener una huelga indefinida hasta el cobro de los salarios. Sin embargo, según pudo saber este diario, ayer a mediodía regresaron a sus puestos de trabajo después de comprobar que las empresas habían ingresado el dinero después de percibir el lunes 100.000 euros del Ayuntamiento, que adeuda a Sermasa y Pau cerca de tres millones.

Las secciones sindicales de UGT y CCOO expresaron su malestar por la situación de estos trabajadores. "Hay que tener mucha cara y muy poca vergüenza para permitir que ésto le ocurra a unos trabajadores que, además, tienen sueldos bajos. El Ayuntamiento y las empresas deberían ser previsores", puntualizó el secretario provincial de la FSP-UGT, José Porras Naranjo, que agregó que los sindicatos exigen la negociación de un convenio "digno para estos empleados. Le pregunto al concejal de Personal, Gabriel Gonzálvez, si es más grave no pagar o protestar porque no te pagan. Los pitos están más que justificados, pero el Ayuntamiento nos amenaza con denunciar para que no hagamos ruido ", dijo.

En iguales términos se manifestó Óscar Rodríguez, de CCOO, que hizo hincapié en que la deuda municipal con Sermasa y Pau roza ya los tres millones de euros.

Por otro lado, el concejal socialista Manuel Caeiro expresó su solidaridad con los trabajadores y culpó al equipo de gobierno: "Estas personas hacen una labor fundamental. Por eso no entiendo la actitud cínica del PP, que ni siquiera da la cara. Si prosigue la misma política de despilfarro y falta de previsión, el triste espectáculo de las manifestaciones se repetirá", apuntó.

Agregó el edil del PSOE que "lo peor es que ningún miembro del equipo de gobierno reconoce la crisis económica. Ese reconocimiento sería el primer paso, pero el PP está en otras cosas. De hecho, la responsable municipal de concesiones, María Teresa García Mellado, ni siquiera ha salido para dar tranquilidad o explicar las medidas que se van a tomar", manifestó.

Por último, Manuel Caeiro destacó que el pago de 100.000 euros a Sermasa y Pau "no va a resolver el problema, pues la deuda asciende a tres millones. Tengo que felicitar a los trabajadores porque han demostrado una gran seriedad profesional que contrasta mucho con la frivolidad del equipo de gobierno, que parece estar poniendo de moda que hay que manifestarse con bombos y pitos a las puertas del Ayuntamiento. Un político serio debería prever eso y anticiparse a los acontecimientos. La ciudad necesita seriedad y estabilidad, cosa que el actual Gobierno local no puede ofrecernos", finalizó.