Grande-Marlaska confirma que la muerte de Morodo fue un accidente

El ministro del Interior en funciones, Fernando Grande-Marlaska, señaló este miércoles que la muerte de Alfredo Morodo, vecino de La Línea que perdió la vida en el pasado martes de madrugada en Gibraltar tras una persecución por mar por parte del Servicio de Aduanas del Peñón, fue un "lamentable accidente", como adelantó Europa Sur tras conocer la declaración ante la Guardia Civil de su único acompañante en la embarcación.

Marlaska indicó que el fallecimiento de Morodo se está investigando tanto por parte de las autoridades de Gibraltar como por las fuerzas de seguridad españolas y lamentó el fallecimiento del vecino de La Línea. Tras expresar sus condolencias a la familia del fallecido, el ministro destacó las "buenas relaciones" de "coordinación y colaboración estrechas" entre las autoridades del Peñón" y las españolas que se encargan de investigar lo sucedido.

El delegado del Gobierno central en Andalucía, Lucrecio Fernández, ha informado este miércoles de que la autopsia al cadáver de Alfredo Morodo se realizará el próximo sábado "porque Gibraltar está esperando que venga un equipo médico forense de Londres".

En declaraciones a los periodistas en Córdoba, acompañado por el jefe superior de la Policía Nacional de Andalucía Occidental, José Antonio Pérez, el representante del Ejecutivo estatal explicó cómo fue el suceso: "Es un incidente de una patrullera de Aduanas de Gibraltar que tras avistar bastantes barcas de noche y sin luces, que previsiblemente estaban alijando tabaco, por accidente choca contra una de ellas con el resultado de una persona muerta".

Fernández aseveró que los servicios de información del Gobierno español intercambian información con las autoridades de Gibraltar "para esclarecer lo máximo posible el hecho", si bien remarcó que "es un incidente que se provoca y produce con Aduanas de Gibraltar".

El protocolo de la colonia británica para este tipo de investigaciones establece que la autopsia debe realizarla un patólogo forense procedente del Reino Unido, según fuentes gibraltareñas. Esta circunstancia hará que aún se necesiten varios días antes de que el cuerpo pueda ser trasladado a La Línea.