Rajoy afirma que no aceptará un acuerdo tripartito sobre Gibraltar

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, afirmó ayer ante el Comité Ejecutivo Nacional del PP que seguirá defendiendo "sin estridencias" los intereses de España en el contencioso abierto con el Reino Unido a cuenta de Gibraltar y aseguró que no se aceptará "ningún tipo de acuerdo o negociación con carácter tripartito".

Rajoy trasladó este mensaje durante su intervención ante la Ejecutiva del PP, la primera reunión que mantiene este órgano en el nuevo curso político, según explicó en rueda de prensa la secretaria general de los populares, María Dolores de Cospedal.

El jefe del Ejecutivo habló de los problemas fiscales, medioambientales, de pesca y de contrabando que existen con el Peñón y dejó claro que España cumplirá con su responsabilidad y obligación de defender sus intereses.

Rajoy recordó las denuncias que ya se presentaron ante las autoridades de la UE por la situación de Gibraltar como paraíso fiscal y por temas medioambientales, como el vertido de 70 bloques de hormigón en aguas españoles que rodean a la Roca.

"No vamos a aceptar ningún tipo de acuerdo o negociación con carácter tripartito como hizo el Gobierno anterior", subrayó Rajoy ante sus dirigentes.

Fuentes del PP explicaron en este sentido que Rajoy garantizó que no habrá ninguna reunión para negociar a tres bandas, en referencia a ese Foro Tripartito puesto en marcha por el Gobierno socialista de José Luis Rodríguez Zapatero y que ponía en igualdad de condiciones a España, el Reino Unido y Gibraltar.

Cospedal explicó que Rajoy trasladó al PP que los temas de soberanía sólo se hablan con el Reino Unido y que el resto de asuntos se tratarán en otros foros. El Gobierno es partidario de abordar esos otros asuntos -principalmente los relacionados con el medio ambiente y la pesca- a cuatro bandas, es decir también con la aportación de Andalucía.

Las mismas fuentes del PP señalaron que Rajoy insistió en calificar de "inaceptable" el vertido de esos bloques de hormigón -que impiden faenar a los pescadores españoles- y que se tomarán las medidas legales que estén al alcance.

Por otra parte, el ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, José Manuel García-Margallo, comparecerá hoy en el Congreso de los Diputados para explicar el conflicto, tras seis semanas de cruces de denuncias y reproches que han llegado hasta la Comisión Europea, que enviará próximamente un equipo de observadores a la zona.

El jefe de la diplomacia española presentó el lunes 12 de agosto una solicitud para acudir, a petición propia, a la Comisión de Asuntos Exteriores de la Cámara Baja con el objetivo de "informar sobre los últimos acontecimientos en relación con Gibraltar". El ministro solicitó comparecer la primera quincena de septiembre, ya en el periodo ordinario de sesiones. El mismo día en que se registró su petición, el Grupo Parlamentario Socialista presentó en el Congreso un escrito para solicitar la comparecencia de García-Margallo en la Comisión Mixta para la Unión Europea para "informar del estado de las relaciones con el Reino Unido a propósito de Gibraltar".

Las peticiones se presentaron en la Cámara Baja después de la conversación que mantuvieron el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y el primer ministro británico, David Cameron, quien propuso esta conversación para protestar por los atascos en la Verja por los controles de las fuerzas de seguridad españolas al paso de personas, vehículos y mercancías.

Después de este vertido, que el Gobierno llevó a la Fiscalía de Medio Ambiente, con una denuncia que comunicó a la secretaria de la Comisión Europea, las autoridades del Peñón denunciaron que se habían incrementado las colas para cruzar el control fronterizo.

El ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete, aseguró ayer que el Ejecutivo "tiene la razón y la ley" y advirtió de que no está dispuesto a "abdicar de los legítimos derechos" de los españoles en la resolución del conflicto. Arias Cañete dice que el Gobierno español está "abierto al diálogo" y cree que "hará falta mucho diálogo" para solventar el conflicto con la colonia.